Desde el mismo organismo y la Comisión para la Paz y el Entendimiento explican el dificultoso escenario para las enmiendas de reparación indígena.
En pleno proceso de estudio de enmiendas y debate sobre las indicaciones presentadas por los consejeros y consejeras constitucionales, si bien hay discrepancia natural en varios puntos que buscan consagrarse con rango constitucional, en lo que respecta a cómo se ha abordado el tema Estado-Pueblos Originarios la situación, según fuentes consultadas, se torna compleja.
Por un lado, solo hay un representante de Pueblos Originarios (PP.OO) en el órgano constituyente, Alihuen Antileo, quien presentó una serie de enmiendas, en conjunto a Unidad Para Chile, que busca defender una vez comience la votación de estas el 21 de agosto.
Desde otra vereda, el comisionado Adolfo Millabur, quien pertenece a la Comisión Presidencial Por la Paz y el Entendimiento, señaló que percibe poca discusión en torno a las demandas históricas de los Pueblos Originarios. Asimismo, la consejera constitucional, Paloma Zúñiga (RD), dijo categóricamente que “creemos sin duda que estamos frente a un retroceso”.
En pleno ejercicio democrático por levantar una nueva propuesta constitucional para el país, la consejera Paloma Zúñiga, señaló que la discusión y ambiente respecto a los PP.OO en los debates dentro del Ex Congreso de Santiago expresan un retroceso.
Lo anterior, según explicó Zúñiga, es porque “se ha demostrado un cierto grado de intransigencia política y de imposición por parte de la derecha, ya que son más e impiden que se escuche la opinión de los pueblos originarios sobre esta materia”.
Junto a ello, explicó que hay una falta notoria de voluntad política, fundamentando que Chile está suscrito a ciertos tratados internacionales, como el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el cual obliga al Estado a realizar consultas cada vez que se adopte una medida constitucional, legislativa o administrativa, que afecte directamente a los Pueblos Originarios.
“Es importante recalcar que, en los dos procesos previos -del Gobierno de Michelle Bachelet en el que se hizo el primer proceso constituyente de reforma y con Piñera-, sí hubo Consulta Indígena a nivel nacional. Estaban los elementos técnicos para realizarse. Lo que aquí ha ocurrido es una falta de voluntad política”, sentenció la consejera constitucional por el Biobío, Paloma Zúñiga.
Cabe destacar que Diario Concepción solicitó una evaluación a la consejera Patricia Spoerer (Republicanos). Sin embargo no se concretó por problemas de agenda.
Dentro de las enmiendas impulsadas por Alihuen Antileo, se encuentra la que incorpora un tercer inciso al artículo 7 del primer capítulo de Fundamentos del Orden Constitucional.
Dicha enmienda busca que la Constitución reconozca la especial relación entre los pueblos indígenas y la tierra, por lo que “la ley contemplará un mecanismo de regulación, reparación y restitución de tierras indígenas”.
Lo anterior, sería un símil a la actual Comisión Presidencial Por la Paz y el Entendimiento, la que, dentro de sus principales objetivos, busca la agilización en la restitución de tierras a los Pueblos Originarios.
En ese sentido, el comisionado por el Biobío, Adolfo Millabur, explicó que “entiendo la enmienda de Alihuen en el sentido de la continuidad en un rango superior a la que hoy constituye la Comisión por la Paz y el Entendimiento. En ese sentido, tiene una buena dirección”.
De todas formas, dijo ser escéptico a que ese tipo de enmiendas logren aprobarse por el pleno debido a cómo está constituido, en términos de fuerzas políticas. “Por lo menos, en el anteproyecto de los expertos interpretan una parcialidad de lo que los Pueblos Originarios hace rato venimos planteando”.
Sin embargo, indicó que “creo que se ha debatido poco. Alihuen ha hecho lo que está dentro de su alcance por lo que entiendo. El margen es bastante estrecho para debatir los temas de los Pueblos Originarios. (…) Veo dificultoso que queden consagrados derechos en la nueva propuesta constitucional”.
Por su parte, la también comisionada, Gloria Callupe, distinguió, en primera instancia, la autonomía del Consejo Constitucional para llevar adelante el trabajo de proponer una nueva Carta Fundamental.
Ahora bien, respecto a la enmienda presentada por el consejero Antileo, explicó que “entiendo de esta enmienda que lo que busca no es constituir una comisión diferente, sino que dar continuidad al trabajo y a los mecanismos que va a proponer esta Comisión Presidencial para la Paz y el Entendimiento”.
Esta última, a su juicio, mantiene “una profunda convicción de desarrollar un trabajo que aporte, que sea realista, pero que también recoja la historia, los relatos y los dolores que hay y que son parte de la historia Mapuche y de Chile”.