Desde los incendios forestales que el público se alejó de uno de los balnearios más importantes de la zona. Locatarios optaron por sistemas de turno, para atender a los escasos clientes que arriban al borde costero, entre otras medidas.
“No hay repunte”. Así describen el escenario que enfrentan los comerciantes y locatarios de Dichato, en Tomé, al ver sus locales con poca clientela. Imagen que se repite en todo el balneario y que trata solo de calles vacías.
Y es que la compleja situación de la localidad costera, que comenzó con los incendios forestales de febrero, se ha ido recrudeciendo con el paso de los meses al no mostrar señales de recuperación.
A esto también se suma los estragos que ha sufrido la playa con la llegada de desechos y ramas que fueron arrastradas por las inundaciones y que terminaron desembocando en el mar.
“En febrero, con el tema de los incendios, nos vimos bastante afectados, porque no tuvimos público. Si bien no existió lugares quemados en esta zona, si el público no ha venido. De hecho, los fines de semana tampoco se ven personas y esto ha coincidido en que estamos en periodo de invierno”, detalló la presidenta de la Cámara de Comercio y Turismo de Dichato, Cristal Ortega.
La representante gremial aseguró que como locatarios han tenido que tomar distintas medidas para poder asegurar ventas en lo que va de este año, entre ellas, se han comenzado a definir turnos de atención al público entre algunos locales cercanos al balneario. “Esto ha llevado a que la mayoría de los locales se turnen en la costanera para tener sus locales abiertos, pero no hay público. Hace meses que ha estado muy mal el tema de las ventas acá en Dichato”, señaló Ortega.
“Se está haciendo oferta gastronómica, ofertas en el arriendo de casas y cabañas también, pero ni con eso hemos tenido recuperación en el sector”, agregó.
Por su parte, Viviana Agurto, del local Doña Cristy de Avenida Pedro Aguirre Cerda, graficó cómo le ha ido al local con sus ventas en las últimas semanas y señaló que “últimamente yo he tenido cuatro o cinco mesas máximo en la semana. En el fin de semana, el sábado tuve cuatro mesas y el domingo me fue un poco mejor, día en que tuve diez mesas. Esto en comparación a cuando antiguamente yo tenía 15 o 20 mesas el fin de semana por día”.
Asimismo, la locataria se refirió a la llegada de personas al balneario, junto con los horarios en los que se contempla mayor cantidad de público, y comentó que “ha bajado mucho el público y también se ve poco auto. Lo que observamos también es que la gente viene después de almuerzo. Llegan a las 3 o 4 de la tarde, a dar vuelta a la playa y nada más, no hay consumo específico en los locales”.
“Esto se ve desde mediados del año pasado. Desde ahí empezó la decaída a fondo. También cuando empezaron los incendios forestales se marcó aún más la caída de la llegada de personas”, recalcó Aburto.
El famoso Centro Comercial de Dichato también ha sido testigo de la notoria baja de personas que llegan al balneario. Mesas vacías y locales cerrados son la postal que ha marcado por semanas al “mall” de Dichato. Esto a tal punto de que algunos locales han tenido que cesar sus funciones por algunos meses.
“Está medio lento el movimiento comercial acá. El año pasado estuvimos abierto todo el año, invierno, verano. Este año estuvimos cerrados abril, mayo y ahora abrimos por las vacaciones de invierno, pero no se ve el flujo de lo que se veía el año pasado. No hay repunte”, expresó Sergio Arzola, locatario del Restaurant Matvavi del centro comercial costero.
De la misma forma, Arzola también aseguró que la compleja situación se ha arrastrado desde la catástrofe de los incendios forestales en la Región, y la situación por la que pasó Tomé. “Todo el cielo acá era rojo, completo por todos lados. Arrancó harta gente y desde ahí que se ha mantenido bajo. La verdad es que no sé si será temor o un tema económico. La situación viene arrastrándose desde hace varios meses, como de febrero y también está bajo en relación con el año pasado”.
Arzola sostuvo que ahora el local se mantendrá abierto hasta el cierre del verano del 2024 y esperan poder recuperar sus ventas. Dentro de su preocupación, el locatario aseguró que la clientela ha bajado en un 40% en comparación a la misma temporada invernal en 2022. “Me imagino que esto igual se ha visto también en otros locales”, cerró.
Al mismo tiempo, Francisco León, representante legal del local Aloha, también ubicado en la avenida que recorre el borde costero, indicó que “este tiempo ha sido complicado. Además, febrero siempre fue el mes ganador, y que nos ayuda a soportarnos durante el año, fue perjudicado mucho por los incendios (…) marzo fue muy malo y desde ese mes para en adelante la llegada de clientela ha sido muy baja”.
Centro Comercial de Dichato ha visto una notoria baja de clientes en lo que va del 2023. | Foto: Raphael Sierra P.
El sector de hospedaje también se ha visto golpeado. Mónica Inostroza, administradora Cabañas Rucahue en Dichato, afirmó que la situación comercial en el balneario “está demasiado mala. Por ejemplo, el año pasado en vacaciones de invierno tenía gente en las cabañas que llegaba los fines de semana, del jueves hasta el domingo, y ahora nada, recién hace poco llegó un matrimonio a una cabaña chica y el resto nada”.
“Antes hubo gente siempre en este tiempo, hasta cuatro cabañas ocupadas, pero es que las personas tenían mayor liquidez en ese tiempo”, agregó Inostroza.
La alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas, analizó el crudo escenario comercial y turístico del borde costero en Dichato y ratificó que se ha mantenido así desde febrero de este año, tras los incendios forestales.
“Efectivamente, con el tema de los incendios forestales no solamente los sectores que se vieron afectados tuvieron complicaciones, sino que también a todo el sector turístico que hay en Dichato, acá en Tomé. Llegaron muchos menos visitantes que en los años anteriores, hay que recordar que estuvimos más de tres semanas con catástrofes”, explicó Rivas.
Además, la edil habló sobre las acciones que están tomando como administración municipal para revertir la situación y reconoció que “prontamente vamos a informar el Festival de Dichato que se va a desarrollar muy pronto. Es un trabajo que se está haciendo entre el Servicio Nacional de Turismo (Sernatur); la Municipalidad de Tomé y el Gobierno Regional del Biobío. Esto, para poder atraer más público y también estamos desarrollando ferias costumbristas para potenciar la comuna”.
Otra problemática que se ha sumado en el balneario es la presencia de desechos y ramas en la playa que fueron arrastrados, y desembocaron en el mar, por el histórico sistema frontal de hace algunos días en la Región del Biobío.
Al respecto, Rivas confirmó que “le hicimos una solicitud a la Seremi de Obras Públicas en el Biobío para que nos puedan entregar implementación y poder limpiar. No obstante, hoy hay maquinarias que llegaron desde Senapred para trabajar en distintos lugares de la comuna y está incorporado Dichato”.
Pedro Aguirre Cerda, avenida que recorre el borde costero, completamente vacía. | Foto: Raphael Sierra P.