Indican que la seguridad y la estética urbana van de la mano, por lo que para mejorar ambas, se debe realizar un trabajo multidisciplinario y con participación ciudadana.
La ciudad de Concepción, siendo capital de la Región del Biobío, requiere de numerosas mejoras en la estética y arquitectura de sus espacios públicos, según plantean especialistas en la materia. Por un lado hay plazas que han quedado en cierto abandono, que son altamente visibles tanto para visitantes, como para los habitantes de la ciudad. Además, es necesario enfrentar el comercio ambulante ilegal y las incivilidades para dar mayor belleza a la ciudad.
Uno de los eventos que ha dañado más estéticamente los espacios del centro de Concepción, fue la violencia con que ciertos grupos aprovecharon el estallido social para realizar desmanes. La ciudad no se ha podido rehabilitar de aquello y devolverle el valor a los espacios públicos, aseguró Claudia García, magíster en Ciencias de la Ingeniería y académica de la Universidad de Concepción. “Se percibe un deterioro ambiental general, en lo arquitectónico. La intervención de las fachadas con cierres herméticos ha generado un quiebre del vínculo de las actividades que se genera en interiores con lo que pasa en el espacio público, que es lo que produce la vitalidad urbana”, indicó.
De acuerdo a lo que postuló García, esos cierres generan respaldo para que el comercio informal se instale y agudice el deterioro del ambiente disminuyendo el espacio de circulación e incrementando la sensación de inseguridad. “A lo anterior se suma un comportamiento masivo de no respeto a las normas mínimas de convivencia vial, como por ejemplo estacionarse en lugares no habilitados como plazas y veredas que contribuyen al deterioro material de los pavimentos”, estableció.
La académica, sostuvo que este conjunto de situaciones finalmente genera una percepción de abandono, que termina generando el efecto de la ventana rota. El efecto de la ventana rota se desprende de un estudio social que estableció que cuando no se repara una ventana rota, o una conducta no deseable, en un entorno hay una especie de contagio del deterioro que se multiplica y genera un estado general de abandono, explicó Claudia García y agregó que “implicando justamente lo que hemos visto en lo que ha sucedido en el centro”.
En tanto, Sergio Baeriswyl, arquitecto y doctor en Urbanismo indicó que “el centro de Concepción viene sobrellevando un desafío muy grande desde la década de 1990, con la llegada de los grandes centros comerciales, como los Malls en zonas periféricas. Dejó de ser el único centro de servicios comerciales y aunque logró sobrellevar este impacto en su momento, en los últimos 10 años se ha observado un deterioro sistemático”.
El problema se ha acentuado con el estallido social junto con la pandemia, comentó Baeriswyl y agregó que en la actualidad se encuentra en un estado crítico, al que se ha sumado la inseguridad. “Pero lo más lamentable, es la ausencia de proyectos urbanísticos de inversión pública o privada, lo cual hace imposible revertir su actual condición”, manifestó.
Claudia García Lima, quien fue seremi de Transportes del Biobío, nuevamente resaltó la remodelación de la plaza y su proyecto de intervención en las veredas, pero afirmó que considera que tiene que extenderse a otras áreas: el eje Barros Arana en toda su extensión desde el Mall del Centro hacia la Plaza España. “Que es otro elemento que está muy abandonado que es uno de los más importante de la capital regional porque es la antesala del Gobierno Regional, pero básicamente es una plaza que está relegada a estacionamiento”, detalló.
En el centro está la conexión de Caupolicán con el espacio del mercado. “Freire y Maipú que tienen un gran deterioro, son calles absolutamente abandonadas, veredas súper angostas, todas estas acciones que se están haciendo para despejar el comercio ambulante no han sido suficiente para esta calles”, describió García.
En cuanto a los espacios públicos Sergio Baeriswyl estableció que son los prioritarios y añadió que “hablamos de calles y plazas, donde es necesario mejorar las condiciones de aseo, iluminación, ornato, paisajismo, arborización, mobiliario urbano y recuperación de fachadas, pero esto de la mano de mejorar las condiciones de seguridad en particular del comercio ilegal”.
Para poder abordar bien este problema, Claudia García detalló que es necesario comprender que se trata de una situación en donde confluyen varias dimensiones y deben considerarse aspectos relacionados con seguridad ciudadana, uso del espacio público, convivencia vial, comportamiento de la sociedad civil. “Por esta razón, es importante que la intervención tenga una perspectiva integral que implique sin duda el abordaje de la seguridad ciudadana, pero también desde el espacio público, como promover la recuperación y remoción de las fachadas ciegas, fiscalización de estacionamientos en lugares no habilitados, especialmente veredas y plazas”, puntualizó.
Efectivamente se han observado esfuerzos importantes desde la acción pública que van en el camino correcto, como la remodelación de la Plaza de Independencia y su entorno, comentó Claudia García, quien también habló de la importancia del copamiento policial (que se espera recuperar) para continuar controlando la proliferación del comercio informal. “No obstante, falta aún mayor fuerza en la promoción y cooperación también de la acción privada, para que el comercio y los servicios también contribuyan renovando y recuperando sus fachadas”, apuntó.
Se requiere de mayor fiscalización para evitar el uso indebido de las veredas como estacionamiento. “El Estado, el municipio, el Gobierno Regional, la Delegación Presidencial, deben liderar un gran pacto social entre todos los actores, para generar una coordinación concertada para que aquellas acciones puntuales no se diluyan ante la magnitud del problema”, expuso.
Respecto de ejemplo internacionales, García, nombró a Barcelona, Nueva York, Paris, como ciudades que están ampliando sus veredas, generando más áreas verdes, incrementando la vitalidad urbana, potenciando con ello el comercio y el turismo.
Sobre las posibles soluciones, el Dr. en Urbanismo, Sergio Baeriswyl, apuntó que “es necesario contar con un plan de inversiones en infraestructura de espacios públicos, abordar con mayor prontitud el proyecto de recuperación del Mercado, mejorar la peatonabilidad del centro, ampliar la red de bulevares, transformar la Plaza España en un espacio cívico significante”.
Además de mejorar la conectividad del centro de Concepción con el Parque Ecuador y recuperar edificios patrimoniales. “En general y realizar todo tipo de acciones y actividades que hagan que los habitantes quieran vivir o visitar el centro”, sostuvo.
