Autoridad señaló que hay un incremento de 6% de siniestros respecto de temporada pasada.
El aumento constante de incendios forestales que, hasta el momento, representa un 6% más de ocurrencia de estos fenómenos que la temporada pasada a la misma fecha, para el director regional Biobío de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Rodrigo Jara, se va a repetir de aquí en adelante, puesto que “la región no está ajena a los efectos del cambio climático”, indicó.
“Y como se dio el año pasado, es probable que podamos tener incendios forestales incluso en abril”, afirmó la autoridad, estableciendo que hasta el momento se consideraba como periodo de temporada de incendios forestales hasta marzo, pero dada las condiciones actuales del clima se está extendiendo en un mes.
“Trece años de sequía; temperaturas anómalas para nuestra región, estamos teniendo temperaturas sobre los 26 grados; y condiciones de viento importantes, ráfagas muy fuertes desde el Suroeste. Todas estas condiciones van generando una situación que propicia la propagación de incendios ante conductas inadecuadas de los ciudadanos”, agregó el director de la corporación.
Ejemplo claro de aquello, fue el incendio ocurrido en Santa Juana-Nacimiento, en que “la propagación o crecimiento del incendio estuvo directamente relacionada a las condiciones climáticas de los días. Nos encontrábamos en una alerta temprana preventiva de incendios forestales producto de las altas temperaturas, fuertes vientos y baja humedad relativa, la gran cantidad de combustible seco que existe el día de hoy en el sector rural y las condiciones topográficas bastante complejas”, explicó Jara.
Todo lo anterior, dijo el director regional, llevó a un aumento de incendios de un 6%. Es decir, 986 incendios comparado a 931 del 2022, los cuales han afectado a una superficie actual de 7.585 hectáreas, lo que significa una diferencia de 253% de hectáreas incendiadas más que el año anterior.
En cuanto al incendio de Santa Juana , existe una investigación de causas que el equipo de profesionales de Conaf levantó. “Ahora se encuentran consolidando la información, generando el informe respectivo que va a quedar a disposición de la PDI y el Ministerio Público. Pero, lo que nosotros podemos estimar, es que hasta el momento llevamos cerca de un 60% de incendios intencionales, según las investigaciones que ya han sido finalizadas. Hay otros incendios que están en proceso de investigación, por lo que obviamente esta cifra de intencionalidad puede ir variando”, señaló el director de Conaf.
Tal como menciona Rodrigo Jara, la única forma de hacer frente a todas aquellas variables relacionadas con el clima y naturaleza, es focalizarse en la prevención. “Desde agosto hemos tenido reuniones con los municipios, existen también acciones puntuales de coordinación con las empresas, generando corta fuegos, fajas libres de vegetación, fajas corta-combustibles en distintos sectores”, detalló.
“Conaf se ha enfocado en la educación ambiental a niños en escuelas básicas de 4to y 5to año, porque vemos y tenemos la convicción de que son los niños son factores de cambio, quienes pueden llevar este mensaje a las familias y pueden lograr que se hagan cambios fomentando la prevención”, comentó el director de Biobío.
Con acciones llevadas a cabo durante todo el año, más el refuerzo que hace durante la temporada de ocurrencia de mayores incendios forestales, Conaf realiza la prevención, aumentando el personal que participa en prevención con campañas de volanteo, en carreteras, puerta a puerta y en ferias.
Por sobre todo, la corporación espera generar conciencia del daño que significa un incendio forestal y todas las acciones que pueden resultar riesgosas, junto con el llamado a denunciar a quienes provocan incendios.
“Tenemos una intencionalidad bastante alta que se tiene que combatir. Yo creo, con penas duras y severas respecto de quienes se logre identificar y detener. Muchas veces conversando con la gente en el sector rural, dicen saber quién anda quemando, pero les da miedo denunciar”.
Respecto de lo anterior, la forma segura de denuncia que recomienda Conaf es el número *4242, Denuncia Seguro, que es útil en cualquier tipo de delito y donde todo ciudadano puede proteger su identidad al entregar información. “Cometer un incendio es un delito penado por la Ley 20.653 que condena con pena efectiva a un ciudadano que se corrobore que es el culpable, con entre 5 a 20 años de prisión efectiva”, afirmó Rodrigo Jara.
A las juntas de vecinos de sectores rurales también se les prepara desde el punto de vista más práctico para proteger sus casas de un posible incendio, a través del programa Comunidades Preparadas, se llevan acabo talleres de dos días en dónde se les capacita. “Les enseñamos a tener anillos de protección respecto a sus viviendas, trabajo similar realizan las forestales y la Red Comunitaria de Prevención”, indicó el director de Conaf.
Un anillo de protección consiste en manejar correctamente la vegetación en torno de una vivienda. “Debe haber una franja de protección en torno a la casa de un ancho delimitado de 5 metros con cero vegetación, con el suelo mineral expuesto. Luego, un segundo anillo, que puede ir de los 10 a 15 metros en donde puede existir una vegetación baja como un pasto o una pequeña pradera muy manejada”, acotó Jara.
El objetivo principal de los anillos de protección es que el fuego vaya bajando hasta llegar a dónde no existe vegetación. “Sobre 20 o 30 metros, una vegetación intermedia de arbusto y pasar después a una plantación, lo que se va generando es una escalera vegetacional”, detalló el director de la Corporación Nacional Forestal.
Actualmente, la Conaf y Forestal Arauco, realizan trabajos en torno al Parque Nacional Nonguén y existe una serie de acciones que se coordinan entre empresas, municipios, Bomberos, la Delegación Presidencial, el Sistema Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres para mantener la coordinación necesaria. “El combate de incendios forestales, no es una acción que pueda realizarse de manera individual, hay que entender que esto es tarea de todos incluidos los ciudadanos, también deben tener una conducta preventiva de autoprotección”, cerró.