La situación es agobiante para los municipios, considerando la poca vida útil que resta a los vertederos y la falta de recursos para trasladar los desechos a otras ciudades. Confían en una pronta inyección de recursos desde la subsecretaría.
Biobío experimenta una crisis de basura: vertederos al tope de su capacidad y municipios sin recursos suficientes para trasladar residuos a otras regiones.
La alerta fue presentada y, luego de diversas instancias y reuniones desde septiembre, el pasado 1 de diciembre, el gobernador regional,Rodrigo Díaz, se reunió con la ministra del Interior, Carolina Tohá, para presentar la problemática.
“Lo que hemos dicho a la ministra es que desde el Gobierno Regional, con cargo a nuestros fondos de emergencia, estamos disponibles a ayudar entre todos, porque algo tendrá que hacer el Ministerio del Interior a través de la Subsecretaria de Desarrollo Regional (Subdere), y juntaremos los esfuerzos”, explicó Díaz.
Esto se traduciría en inyección de recursos a corto plazo para resolver la urgencia antes del cierre de los vertederos; una solución a mediano plazo enfocada a las tramitaciones ambientales;y en el largo plazo, un modelo definitivo para la gestión de residuos, enfocado en el reciclaje y generación energética.
Una “solución del siglo XXI”, dijo Díaz, que tendría como puntapié el arribo de Nicolás Cataldo,subsecretario de DesarrolloRegional, a la zona durante las próximas semanas. “Concordamos con el Subdere reunirnos en la Región, que lo haremos antes de fin de mes, para dedicarnos exclusivamente a resolver este problema”, aseguró Díaz.
Pese a las buenas noticias, el cansancio ante la falta de sitios para la gestión de desechos es notorio entre los alcaldes de la zona y llamaron al gobierno a subsidiar esta necesidad.
En la municipalidad de Hualpén crece la angustia a medida que avanza el reloj, ya que en poco más de 90 días, la administración no tendría dónde llevar los desechos comunales.
Cabe mencionar que la basura de Hualpén es vertida en el relleno Hidronor de Copiulemu, empresa que informó que recibirán los residuos hualpeninos hasta abril del 2023, a pesar de que el contrato tiene fecha de vencimiento el 2033. Y es que tiene solo un 2% de espacio disponible. “Es un problema que nos tiene acongojados. Han pasado bastantes reuniones y lo que esperamos hoy son respuestas”, dijo Miguel Rivera, alcalde de Hualpén.
La solución más rápida, agregó, sería la llegada de recursos frescos, aunque no sería suficiente. “Lo fundamental es que se puedan inyectar recursos. Pero lo ideal es que se busque solución a la problemática de manera permanente, entendiendo que una inyección de recursos va a ser una solución parche”, manifestó el jefe comunal.
“Hoy es Hualpén y Talcahuano, mañana serán otras comunas, y si no tenemos una solución pronta a un problema que es estructural, vamos a seguir viendo las mismas complicaciones el próximo año”, aseguró.
En tanto, la municipalidad de Talcahuano iniciará prontamente el proceso de licitación de los desechos sanitarios, según informó su alcalde, Henry Campos. Esto, dijo, cierra las puertas a algunos oferentes, considerando que son pocos los lugares disponibles para verter las basuras domiciliarias.
“No hemos tenido mayor respuesta salvo la mesa técnica que se conformó con el Ministerio del Medio Ambiente. Pero ya no queremos más mesas técnicas, queremos recursos y soluciones definitivas para un problema que está a la vuelta de la esquina”, declaró Campos.
Desde esta perspectiva, bien lo dijo el alcalde porteño, “lo que nos estaría quedando es esperar que el gobierno pueda adicionar recursos, ya sea a través de la Subdere para subsidiar la disposición final de algunos municipios, porque vamos a tener un problema sanitario complejo si no tenemos lugares donde depositar dentro de la Región”.
