El denominado “C3” habilitó la antigua Escuela República Argentina para convertirlas en salas de reuniones, áreas de trabajo y talleres para fomentar la innovación y la creatividad. El proyecto fue posible gracias a una inversión del municipio, Corfo y del Comité de Desarrollo Productivo Regional del Bío Bío, por un monto total que bordeó los 200 millones de pesos.
El denominado “C3” habilitó la antigua Escuela República Argentina para convertirlas en salas de reuniones, áreas de trabajo y talleres para fomentar la innovación y la creatividad. El proyecto fue posible gracias a una inversión del municipio, Corfo y del Comité de Desarrollo Productivo Regional del Bío Bío, por un monto total que bordeó los 200 millones de pesos.