Los empresarios explicaron que el sector tiene clientes asegurados y que las dificultades son para aquellos que ofrecen productos de mala calidad.
Un total de $2 mil millones se inyectarán al sector minero regional a través del Fndr que da vida al Programa de Asistencia Técnica, con un plazo de 24 meses para ser ejecutado.
Si bien el seremi de Minería, Lautaro Benítez, aseguró que el sector goza de “buena salud” y que los compradores son preferentemente del mundo privado, es necesaria la asistencia del Estado, sobre todo en aquellos pirquenes donde las condiciones de trabajo son complejas.
Es por ello que los recursos asignados serán para fortalecer un equipo de 10 profesionales: ingenieros en mina, una prevencionista de riesgo, un perito geomensor, un abogado, una geóloga, un periodista, entre otros.
Uno de los objetivos primordiales será seguir monitorear las condiciones de seguridad y así mantener la actual cifra de cero accidentes mortales en seis años en la cuenca del carbón.
Hoy son alrededor de cuatro grandes faenas que concentran la mayor cantidad de trabajadores, sobrepasando los 500. Otros restantes se distribuyen en pequeños pirquenes. Es por ello que los profesionales juegan un papel fundamental en la gestión.
“Esto exige que estimulemos aquellas faenas que tienen mayor riesgo o que están expuestas por su precariedad por sus limitaciones económicas. La idea nuestra es asesorarlos con energía, comprar equipos, bombas, entre otros elementos que nos permitan ventilar y alumbrar las faenas. Eso es clave”, explicó el seremi Benítez.
Añadió que la estrategia da buenos resultados, sobre todo en invierno, cuando las condiciones se recrudecen. “Es difícil trabajar en quebradas y cerros de la provincia de Arauco. Esto les permite a los pirquineros mayor seguridad”, resaltó Benítez. Es por ello que la entrega de elementos de protección personal son bien recibidos.
Otro ítem relevante son las tareas de sondaje. De hecho, un grupo de mineros junto al diputado Manuel Monsalve (PS) visitaron a la ministra de Minería, Aurora Williams, hace unas semanas, quien se habría comprometido a destinar recursos.
“La tarea es tener una política por parte del Gobierno y del Estado para fortalecer el carbón. Significa hacer una actividad rentable y segura”, destacó Monsalve, quien lamentó el atraso de los dineros.
“Las restricciones presupuestarias que tuvimos durante el año recién pasado y durante este, fue derivado principalmente de las emergencias que tuvimos en los diferentes territorios, incluidos el nuestro”, argumentó Benítez, resaltando eso sí que la situación ya está subsanada.
“He sido más cauto, más modesto y riguroso con ir con calma y buena letra ir ejecutando el presupuesto”, añadió el seremi.
Y cerró diciendo que “estamos trabajando con la mesa del sector, con los empresarios y dirigentes presentando el equipo que ya es bastante conocido”.
No hay crisis
Hace unas semanas un grupo de mineros de Curanilahue reportó a Diario Concepción problemas en la comercialización, en que el hospital de Valdivia habría cortado contrato y que cada días se les hace más difícil poder sostenerse en este rubro.
De acuerdo al empresario Benedicto Huenchuleo, esta situación no afecta a todos los pirquineros, descartando algún tipo de crisis.
“La verdad es que, a Dios gracias, nos falta carbón para vender. Nosotros le entregamos carbón a la empresa remolachera Iansa. También está comprando Agrosuper, las plantas en Tilcoco donde se procesa el tomate y trabajan en la fruta”, reveló.
De hecho, Iansa le compró 12 mil toneladas y a contar de agosto pedirá otro número importante.
Edgard Salgado, empresario de la mina Trinidad, dijo que las normativas siempre pedirán que el carbón cumpla con todo para estar a la altura del medio ambiente.
“El carbón malo nunca se va a vender. Es por eso que tenemos que mejorar, reinventarnos, optimizar las plantas de lavado para poder vender”, recomendó Salgado.
El presidente de la Asociación de Productores de Curanilahue, Ricardo Núñez, también fue otro de los que visitó a la ministra Aurora Williams para pedir más sondajes.
“Hoy más que morir, hay harta venta de carbón. También hay que separar la calidad del carbón (…) Cuando se tiene carbón de buena calidad hay mercado”, aseveró Núñez ante un rubro tradicional que sigue dando réditos.