Bío Bío anotó buenas cifras: Inacer de 2,8% trimestral y un 3% acumulado en el primer semestre. Sobre las cifras nacionales, el seremi de Economía llamó a "tomar estos números con calma".
 

Un crecimiento del 0,5% registró el Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) durante julio de este año, según datos entregados por el Banco Central.

Estas cifras se ubican por debajo de las expectativas de los analistas, que esperaban una expansión en torno al 1,2%, convirtiéndose en el indicador más bajo desde agosto de 2014, cuando en aquella oportunidad aumentó un 0,4%.

Parte del bajo crecimiento se debe al Imacec minero, que cayó un 3,1%, mientras que el no minero aumentó 0,8%. Este último se vio incidido por el incremento de los servicios y del comercio minorista, efecto que fue parcialmente compensado por la caída de la industria manufacturera.

Según Renato Segura, economista y director del Centro de Estudios de la realidad Regional (Cerr), estos números podrían explicarse por la "incertidumbre" que generó la implementación de las reformas Tributaria y Laboral, además de los resultados del próximo proceso de elecciones presidenciales.

En ese sentido, el economista apuntó que "los cambios en las reglas del juego afectaron el crecimiento. El país vivió durante 20 años con reglas claras, eso se rompió en el último tiempo y afecta negativamente a la inversión".

"Además –agrega– no se sabe cuál será la próxima coalición gobernante y eso genera aún más incertidumbre en los actores privados. Esta inestabilidad política se traspasó a la inversión", afirmó.

Para el analista, este proceso de cambios y de bajo crecimiento podría derivar en "ajustes mayores" al mercado laboral. 

En esa línea, sostuvo que "estas cifras nos está indicando que la economía está entrando a un periodo bastante crítico y eso va a tener impactos mucho más fuertes, en la caída del empleo, fundamentalmente".

La información entregada por el Banco Central va de la mano con los resultados que arrojó la última encuesta Plaza Pública Cadem. En esta se reveló que sólo un 10% de los chilenos cree que la economía del país está progresando, mientras que un 89% considera que está estancada o retrocediendo.

El desempleo, en tanto, fue considerado por los consultados como el principal problema económico que enfrenta el país, con un 28% de las menciones, siguiendo de lejos la baja en el precio del cobre (18%), el bajo crecimiento de la economía (13%), la baja productividad (7%) y la inflación (6%).

Panorama regional

Pese a que las cifras preocupan al interior del Gobierno, el seremi de Economía del Bío Bío, Iván Valenzuela, aseguró que "hay que tomarlas con tranquilidad". 

La autoridad gubernamental explicó que "la Región sigue creciendo más en promedio que lo que está ocurriendo a nivel país, por lo que estos números se pueden tomar con un poco más de calma".

En efecto, el crecimiento de la actividad económica del Bío Bío aumentó un 2,8% durante el trimestre abril-junio, según el Indicador de Actividad Económica Regional (Inacer), en desmedro del 1,5% de expansión que se registró a nivel nacional. 

De todos modos, Valenzuela sostuvo que "no estamos creciendo todo lo que esperamos, pero tenemos que analizarlo en el contexto en el que estamos".

"Chile está creciendo y la Región está creciendo más, principalmente debido a sectores preponderantes como la manufacturera, la energía y los servicios en general", aseveró.

No obstante lo mencionado por el seremi, el académico y economista de la Universidad del Bío Bío, Ariel Yévenes, afirmó que "para bien y para mal, la Región tiene componentes de estabilidad bastante grandes".

"Para bien porque en épocas en que el país crece menos nuestra Región tiende a mantener sus ritmos; pero cuando Chile crece, el Bío Bío se queda atrás. Este es un comportamiento bastante típico de lo que se denominan regiones perdedoras, porque solamente se crece más en periodos de crisis o cuando se está creciendo muy lento", argumentó. 

El académico finalmente comentó que "si bien es cierto que podría ser satisfactorio que nuestra Región crezca más que los promedios nacionales, hay que ver realmente el contexto en el que eso se da y eso no deberíamos llamarnos ni a tranquilidad ni a satisfacción".