
La sustracción de madera desencadenó otro daño ambiental, que se suma a otro anterior ocurrido en la misma zona. Sujetos responsables fueron detenidos y las autoridades llaman a cuidar estos espacios y no comprar leña nativa.
Se trata de una fenómeno delictual que se había dado en ocasiones anteriores, con cortes de no más de 10 árboles. Sin embargo, en la madrugada del lunes talaron 60 árboles nativos pertenecientes a un espacio protegido por Conaf.