La Región no sería lo que sin el río Biobío, aunque está sometido a presiones que amenazan sus vitales roles.
Análisis evidenciaron modificación en patrones de lluvias y vientos favorables a la surgencia, lo que tiene potenciales implicancias sobre servicios ecosistémicos y en las actividades y comunidades que se desarrollan en el borde costero.
Que funcione la naturaleza y sus componentes provee desde agua y comida hasta control de plagas y oxígeno al ser humano. Para ello es vital el balance que hoy está en riesgo.