
Se trata de firmas contratistas que trabajan directamente en la Región a través de contratos vigentes con Obras Públicas.
Es un proyecto ampliamente esperado por la Corporación Regional por la Memoria y los Derechos Humanos, que busca mantener la historia reciente del país patente para las futuras generaciones. Según los integrantes de esta organización es un nuevo paso para lo que denominan como reparación.