
Para la comunidad cristiana esta situación es dolorosa e indignante, el pastor que agrede a sus ovejas. Seguramente, roto el telón del silencio, habrá más denuncias, o se sabrá con más detalles la real magnitud de estos hechos.
"Abusó de manera reiterada, grave y sistemática, amparado en el poder que le otorga su condición de sacerdote", afirmó el provincial jesuita, Cristian Campos.