
Cuando hablamos de obras que aportan al mejoramiento del sistema de transporte público, como es el caso de los corredores u otros proyectos, se traducen en beneficio directo para una gran mayoría de habitantes del Biobío.
Este estudio invita a repensar la manera en que diseñamos y construimos caminos y puentes, considerando los humedales no como obstáculos.
De acuerdo a la estimación del MOP, en un año se ha avanzado un 50% en las obras. Un crecimiento sustantivo que debería seguir con más fuerza en la época estival.
En sector Collao en Concepción y Jaime Repullo en Talcahuano hace poco iniciaron nuevos trabajos como parte de proyectos a largo plazo, con profundos cambios. Más allá que deben desarrollarse en algún momento ¿No se pudieron hacer antes las acciones más grandes, pensando que en marzo sube el flujo vehicular?