
Las playas son cercanas a la comunidad local, teniendo gran valor cultural como también ecológico, por lo que es un deber cuidarlas de la nociva contaminación que las mismas personas provocan.
Puede ser una balsa que transporta organismos, hundirse para entregar carbono y alimento, perder peso y recuperar flotabilidad.
La gran cantidad de desechos generada en menos de un siglo ha provocado que haya tanto material inerte como orgánico o vivo en los mares, interactuando con organismos.
Hasta 400 mil fragmentos de estas partículas invisibles al ojo humano se hallan en este común producto.. La absorción e implicancias orgánicas del consumo no están determinadas, pero su ingreso al organismo se asume como un hecho con potenciales nocivas consecuencias e insta a seguir estudiando.
Mauricio Urbina integra equipo investigativo internacional liderado desde Países Bajos que generó un modelo que permite comprender mejor la resistencia o sensibilidad de las especies a la baja de oxígeno del ambiente acuático, dulce o marino, que está aumentando dado el cambio planetario que avanza. Los resultados se publicaron esta semana y pueden ser de impacto para la gestión de la pesquería
Es uno de los ríos más vastos de Sudamérica y de gran caudal, con múltiples usos en su entorno, pero así también se halló al contaminante más ubicuo del mundo. Intervención humana y factores naturales determinan las dinámicas de su distribución y abundancia.