
En una etapa piloto el proyecto formó al personal de 12 consulados, a funcionarios y funcionarias del MINREL del país y a quienes se están preparando para trabajar en consulados chilenos.
La ausencia de un plan de gestión y falta de coordinación entre organismos públicos con facultades para actuar frente daños en estos ambientes son algunas de las falencias mencionadas por los especialistas.