
El cerebro comanda el comer y puede afectarse por la calidad de la alimentación, y entender mecanismos implicados pueden llevar a una potencial y más efectiva solución para un grave problema de salud pública.
El Programa de Neurociencia, Psiquiatría y Salud Mental organizó un Congreso Internacional para convocar y vincular integrantes de los campos de la neurociencia e investigación básica con la aplicada y clínica para abordar complejos fenómenos.