
Fáciles de limpiar y desinfectar, fueron diseñados para proteger a los profesionales y personal de la salud, evitando la propagación y contagio del virus causante de COVID-19.
El equipo ha trabajado en la fabricación de escudos faciales reutilizables con manufactura por impresión 3D, y ya han aportado más mil desde la última semana de marzo.