
La reestructuración del gabinete ocurrido durante la semana, el tercero en lo que va en la era Boric, modificó nuevamente la cabeza del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Ajuste que entendidos locales en la materia artística lo ven como algo que es parte del ajedrez político de los gobiernos y poco compromiso, en general, con la cultura.