Usan tecnología para conectar productores y consumidores de un mismo territorio más directamente y ponen en valor beneficios sociales y económicos de una alimentación local.
Casi cuatro millones de adultos padecen obesidad en Chile, la segunda tasa más alta a nivel latinoamericano. En fuerte contraste, 600 mil personas se encuentran dentro del espectro grave de inseguridad alimentaria.