Entregar una hoja de ruta para estas materias no solo reduce las expectativas, sino que ofrece un horizonte claro para las discusiones que vendrán y que son parte del proceso democrático de construir políticas públicas.
Llegamos al momento de abordar esta deuda histórica con otro enfoque: en vez de sumar reformas a un modelo que evidencia su obsolescencia, se debe crear un nuevo sistema de pensiones, que finalmente, reconozca la contribución de las personas mayores al progreso de nuestro país.
Con inflación en 3%; inversión y ahorro de 20% del PIB junto a una carga tributaria acorde con el crecimiento. La idea es que se ajuste de acuerdo a la productividad.