Pese a que las movilizaciones sociales han afectado al sector, la tradicional zona gastronómica penquista ha visto incrementado el flujo de clientes.
“Es cierto que el verano es un periodo que no favorece estas convocatorias. No obstante, esto no puede ser una excusa para no involucrarse en decisiones con trascendentales implicancias en la vida cotidiana de todos los habitantes de la comuna”.