
Ya no basta con discursos y decir que se hará algo para cambiar las cosas. Lo sucedido el domingo en el Ester Roa obliga a tratar a fondo la violencia en el balompié nacional.
De los iniciales 22 detenidos por los incidentes en el recinto deportivo, se formalizó a 7 personas: 2 por posesión de fuegos artificiales y 5 por usurpación de identidad.
El informe policial fue negativo, argumentando que no contarán con el contingente suficiente para tal compromiso.