Su papá es entrenador de balonmano hace décadas y su mamá también jugó y fue seleccionada en la UdeC, camiseta que hoy defiende. Estudiante de Fonoaudiología, probó varias disciplinas cuando era chica, pero siempre el hándbol fue la principal. Ahora, tras superar una lesión, quiere volver a su mejor nivel.
La alumna de Medicina de la USS, es un caso particular. Mientras algunos viven del deporte o lo ven como un hobby, ella mantiene una relación casi espiritual. Eso le instó a armar la selección de handbol de su universidad, donde hoy brilla como capitana.