Mientras en el país se comienza a conversar con otros partidos, en la zona, si bien hay un espíritu de diálogo abierto, la prioridad es el programa.
La determinación busca que las partes intenten alcanzar un acuerdo previo para evitar un juicio oral. Eso sí, ambos quieren llegar a la instancia a la que dicen tener las pruebas para acreditar los respectivos dichos.