Debemos hacernos cargo de este drama que afecta a muchos chilenos, que se sienten inseguros, desprotegidos y decepcionados por la ineficacia de medidas para frenar a los grupos violentistas.
Que bajen, da lo mismo. Sería una buena lección. Pero la selección chilena no se salvará nunca si lo mejor que sacan los grandes son Villanueva y Moyita a los 21.