En el primer mundo, los delitos de esta naturaleza, acentuados por la crisis financiera, han encontrado una rápida y efectiva respuesta, sin que nadie quede fuera del alcance de la ley, ni siquiera el más encumbrado político.

En cifras generales, se indica que más de un millón de chilenos y chilenas sufre de ansiedad, y cerca de 850 mil padecen depresión, con lo cual Chile es el segundo país de la Ocde que más ha aumentado su tasa de suicidios durante los últimos 15 años.

Un analista de las comunicaciones declara que la salud de las democracias depende en buena medida de la transparencia y disponibilidad de la información y de la capacidad de los ciudadanos para entenderla y analizarla.

En el momento presente, la política chilena, en plena crisis de un sistema que definitivamente ha sido llamado a la pizarra, tiene el deber de demostrar sus potenciales para el logro del bien común.

En el actual proceso naciente de una nueva Constitución para Chile, es necesario adoptar las medidas que corresponda para establecer y garantizar el principio del equilibrio de género en la composición del futuro órgano constituyente.

Puede ser un lugar común aquel de asociar las crisis con las oportunidades, pero hay circunstancias en las cuales esta posibilidad debe ser contemplada de antemano, para no dar paso a la improvisación, o a la confusión entre velocidad de respuesta y la calidad de esta última.