Se trata de una historia de abandono que cumplió 14 años, y esta recuperación también trata de la buena salud del puerto y su alrededor, donde precisamente el terreno abandonado ha sido hasta foco de delincuencia.
Las personas en riesgo que no han acudido a inocularse deberían hacerlo. Las vías están a disposición, solo es una cuestión de voluntad.
Genera la idea que el problema de fondo sigue siendo la seguridad. Pues la garantía de esta haría que el público se mantenga hasta tarde, y con ello, el transporte no tendría problemas de demanda.
Una cifra que bajo cualquier análisis resulta muy baja. En todo caso, no sorprende, dadas las crisis de confianza que ya son históricas.
Independiente de poder llevar servicios a los barrios, un punto que es urgente de revisar es la planificación en cuanto a las edificaciones, tratando de evitar el colapso vial.
El patrimonio no son sólo museos, edificios o lugares tangibles, materiales. También hay tradiciones orales, oficios y otro tipo de expresiones que es muy necesario cuidar.