Congresistas plantean divergencias sobre plan de fortalecimiento industrial del Biobío

A nivel parlamentario se abrió debate sobre efectividad de medidas anunciadas por el Gobierno, las cuales buscan fortalecer la economía regional. Esto tras el cierre de Huachipato.

Por Christian Kairies Gatica

Representantes locales del Congreso de diversos sectores políticos manifestaron dudas acerca del Plan de Fortalecimiento Industrial del Biobío, que trata de un conjunto de medidas a corto y mediano plazo para hacer frente a los desafíos económicos relevantes que enfrenta la Región, el cual fue anunciado este lunes en Concepción.

En este contexto, este plan se anunció en medio de la pérdida de dinamismo productivo en el Biobío y por el cierre de la Siderúrgica Huachipato, que afectó directamente a la economía regional y nacional.

Este nuevo paquete de medidas busca hacer frente a una serie de problemas que vienen palpitando durante el último tiempo en el Biobío. Apoyo y acompañamiento a empresas proveedoras de Huachipato en riesgo, reinserción, movilidad laboral y acompañamiento para el resguardo de garantías laborales, acelerar la inversión pública y privada y desarrollo de nuevas industrias, son solo algunos de los puntos claves que busca promover esta iniciativa.

A nivel de senadores, se valoró, pero con matices.

En este sentido, el senador Gastón Saavedra (PS) destacó que en esto “no solamente se tiene que observar lo que pasa en Huachipato, sino también lo que pasa con el sector forestal o lo que pasa con el sector pesquero que también tiene dificultades en sostenerse como empresa y cómo empleo (…) La acción que está haciendo el Gobierno me parece que, más allá de si es oportuna o no, hay que valorarla porque se presenta un plan que tiene sentido estratégico y ahora hay que buscar la forma en cómo se debe implementar”.

Por su parte, el senador de la UDI, Enrique van Rysselberghe, dijo que “parece adecuado para reactivar la economía regional y absorber el desempleo que genera el cierre de la siderúrgica Huachipato (…) Sin embargo, ‘el infierno está pavimentado de buenas intenciones’; en ese sentido faltan lineamientos concretos sobre las medidas propuestas, así como plazos y montos definidos para invertir y revertir la mala situación local”, destacó.

Faltan asuntos por definir

A nivel de diputadas y diputados, el anuncio levantó más críticas que miradas positivas.

Desde Democracia Cristiana, Eric Aedo, diputado por el distrito N°20, hizo saber que esperaba un plan mucho más ambicioso, desde el punto de vista de facilidades. Esto, para que hubiese más inversión en la región, como por ejemplo algún apoyo tributario a quienes quisieran invertir en la zona. “Creo que eso faltó hoy en los anuncios”, dijo Aedo.

El diputado Félix González (IND), del distrito N°20, expresó que “este plan es más bien un plan que incluye obras que ya se están ejecutando, el puente industrial, la conexión del Puente Bicentenario con la Avenida Chacabuco (…) No hay muchas cosas nuevas; de hecho, no vemos algo nuevo que no signifique proyectos que ya están propuestos por el Gobierno de Piñera y también por este Gobierno”.

La diputada por el distrito N°21, Flor Weisse (UDI), dijo que “como siempre, estamos ante un gobierno reactivo, que nos presenta un plan cuando el cierre de Huachipato ya está consumado y el impacto se sentirá de manera potente en Talcahuano y la región de Biobío”.

A renglón seguido, la representante gremialista también aseguró que “vemos en este plan una serie de medidas que no tienen plazo y menos aún sabemos cuál será su financiamiento, así que tenemos serias dudas de su implementación efectiva, toda vez que el gobierno ha demostrado que no tiene capacidad de gestión de los recursos públicos”.

Roberto Arroyo (PSC), diputado por el distrito N°20, dijo que “el problema es que este plan llega cuando tenemos un mega problema por el gran desempleo que generará el cierre de Huachipato. Nuestra región venía alicaída económicamente desde mucho antes, por lo que una vez más el Gobierno llega tarde”.

Así también, la medida de este nuevo plan fue tildada como “totalmente insuficiente” por la diputada por el distrito N°20 Marlene Pérez (UDI). Esto, considerando el estancamiento económico que enfrenta hoy la región del Biobío. “Los esfuerzos deben ser mucho más concretos”, aseguró la diputada.

Quien se mostró positiva y en línea con lo anunciado, fue la diputada PC, María Candelaria Acevedo. “Valoro la presentación del plan, el cual presenta 32 medidas a corto, mediano y largo plazo. Allí se incorporaron distintas miradas en su confección y en donde se recogieron algunos de los planteamientos que le realizamos al ministro Grau en las distintas reuniones que sostuvimos con él y su equipo en estos meses”, dijo la diputada comunista.

“En particular sobre la industria del acero, vemos que existe total voluntad de este gobierno para que el fin de Huachipato no suponga el termino de esta industria estratégica y en ese sentido, desde el parlamento, seguiremos empujando proyectos que permitan crear una nueva empresa nacional del acero en un futuro próximo”, cerró Acevedo.

Presupuestos y planes concretos

En general, los congresistas se refirieron al presupuesto y a las cifras necesarias para que este plan sea efectivo, es decir, hablaron de las medidas concretas que hay que realizar para que esto funcione.

“Esperaría que el Ministerio de Hacienda nos dijera cuál es la glosa que va a aparecer en la Ley de Presupuestos en dos meses más (…) En noviembre ya vamos a estar votando en la Ley de Presupuestos ¿cuánto más dinero le van invertir a nuestra región?, para este plan que significa un puente de jubilación para quienes están cerca de jubilarse y también un puente laboral para quienes van a tener que reinsertarse en algún lugar, porque mientras tanto van a quedar en el aire, porque de la noche a la mañana van a dejar de vender muchas empresas que solo le venden a Huachipato”, agregó González.

En la misma línea, Saavedra destacó que “tiene que implementarse, sí o sí, un resguardo social para aquellos trabajadores que son contratistas o que son tercerizados, que requieren de seguridad social para enfrentar los difíciles momentos, porque van a quedar sin o quedaron ya sin empleo (…) Creo que va más allá del subsidio que se le pueda entregar a los dueños de las pymes que tienen una relación contractual con estos trabajadores. Se requiere que haya, reitero, seguridad social para ellos”.

Por último, Karen Medina (IND), diputada por el distrito N°21, afirmó que “es fundamental que el gobierno considere la particularidad que se vive en la región con crisis económica, de empleos y de seguridad, por lo tanto, acá las autoridades deben hacer un plan especial enfocado en nuestra región y para potenciar la principal actividad de la zona que se ha visto tan golpeada por el cierre de las industrias”, finalizó.