Pese a presiones embajadora de Chile en Reino Unido se mantiene en el cargo

A propósito de proyecto que impulsaba para Santa Juana en que solicitó recursos al Gobierno Regional del Biobío.

Pese a una serie de presiones políticas tanto del oficialismo como de la oposición, la embajadora de Chile en Reino Unido, Susana Herrera, se mantendrá en el cargo.

Así lo confirmó la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Gloria de la Fuente, tras la reunión sostenida en Cancillería junto a la propia Herrera, instancia que se generó tras las citadas críticas.

Todo lo anterior corresponde a la polémica generada una vez que se supo que la embajadora buscaba impulsar un proyecto en Santa Juana, evaluado en más de US$5 millones, con financiamiento solicitado al Gobierno Regional del Biobío.

“Presentamos (a la embajadora) los argumentos jurídicos. Escuchamos, por supuesto, su argumentación y sobre lo que la Cancillería requirió. Haciendo la evaluación de estos antecedentes tomaremos un curso de acción y una decisión en las próximas horas”, explicó de la Fuente a propósito de que incluso la entidad estatal pidió a la embajadora no continuara con la solicitud.

Gobierno Regional

Desde el Gobierno Regional del Biobío, en tanto, notificaron que efectivamente el 13 de junio recibieron una carta donde Herrera presentaba el proyecto titulado “Living Lab Biobío”. Sin embargo, este no se concretó.

Según el Gore, si bien se realizaron reuniones en formato videoconferencia para obtener más antecedentes del plan, la solicitud no llegó a puerto debido a que la embajadora no presentó ningún documento sujeto a la formalidad que se requiere para estudiar la admisibilidad técnica, social y financiera.

En ese sentido, la institución liderada por el gobernador, Rodrigo Díaz, señaló que no hay “convenio u otra fórmula de entendimiento ni financiamiento entre las partes. Tal como hemos dicho, para el Gobierno Regional del Biobío esto no es más que otra idea recibida que no se materializó”.

El proyecto

La iniciativa formulada por Susana Herrera (junto al biólogo marino y consultor ambiental, Alberto Fuentes), consistía en aportar a regenerar Santa Juana debido a la tragedia ocasionada por los incendios forestales, a través de una “economía circular para el uso maderero y de residuos forestales” y la edificación de “una infraestructura verde turística, productiva local y educativa-tecnológica”, una especie de mercado.

Lo interesante es que no era un proyecto sin apoyo. En la misiva entregada al Gore -timbrada por Embassy of Chile, London-, Herrera expuso que se trataba de una iniciativa trabajada en conjunto a la fundación del Rey Carlos III de Inglaterra, Circular Bioeconomy Alliance (CBA) y “el prestigioso estudio de arquitectura, Zaha Hadid”.

Dicha iniciativa para una de las comunas más afectadas por el siniestro de febrero, requería, aproximadamente, de cinco millones de dólares: $4.347.650 millones.

La alcaldesa de Santa Juana, Ana Albornoz, explicó a Diario Concepción que no estaba informada del proyecto. “No tenemos información respecto al tema”, aseguró la jefa comunal señalando que desde el municipio se enteraron a través de la prensa.

Reacciones

Lo que sucedió con Susana Herrera, trajo diversas reacciones.

Por un lado, el hecho llamó la atención de Cancillería debido a que lo usual es que los embajadores planteen posibles iniciativas a realizarse en alianza con los países o entidades de las naciones en donde cumplen funciones, no que los representantes del país armen los proyectos.

Es así que, además del llamado a Cancillería, diversas personalidades políticas solicitaron su renuncia. Sin embargo, Herrera logró respaldo de la Federación Regionalista Verde Social (Frvs), partido que promocionó su nombre, sin ella ser militante, para que fuese la embajadora de Chile en tierras anglosajonas.

En ese sentido, la presidenta nacional del Frvs, Flavia Torrealba, explicó, en relación a todas las presiones que vivió Susana Herrera, que “es un escenario desolador, creo que tiene que ver mucho con la degradación que estamos viviendo a nivel político (…) No se puede acusar sin conocimiento”.

“Me he asegurado de que la versión de la embajadora coincida con los documentos de respaldo que ella tiene (…) Estaba haciendo un muy buen trabajo, nunca una embajadora en Reino Unido había logrado ese nivel de confianza con la corona Británica”, dijo Torrealba.