Beatriz Hevia: “Tenemos el desafío de acercar a la ciudadanía al proceso”

16 de Agosto 2023 | Publicado por: Sebastián Rojas
Fotografía: Cedida

La presidenta del Consejo Constitucional, Beatriz Hevia, abordó diversas temáticas que atraviesan tanto la misión constitucional como la coyuntura del país. Ante las críticas fue clara al decir que “no venimos a refundar, ni a levantarnos como una esfinge de la moralidad”.

A dos meses y una semana de la instauración del Consejo Constitucional, su presidenta, Beatriz Hevia, abogada de 30 años de Osorno, repasó lo que ha sido la experiencia de dirigir un nuevo órgano constituyente, las críticas hacia su colectividad política y el cómo ve a la sociedad chilena en los tiempos actuales.

Son momentos de frustración, comenta, “hay cansancio”. “Estamos en una crisis institucional”, debido a todo lo que ha ocurrido con el Caso Convenios, pero, no se queda ahí, su motivación está alineada en poder entregar un texto de consenso para el país.

En el ex Congreso de Santiago la presidenta del Consejo Constitucional, Beatriz Hevia, recibe a Diario Concepción en su oficina.

-¿Cómo ha sido la experiencia de ser presidenta de un Consejo Constitucional a dos meses de su inicio y en un país que ya rechazó una instancia constituyente?

-Tomé con mucha responsabilidad el encargo que se me hizo, entendiendo que no es una actividad individual, sino que sigue siendo algo colectivo. Yo no estaría en la presidencia si es que no hubiera veintidós consejeros republicanos que votaron por mi persona, y los votos de Chile Vamos, que también nos acompañaron. Por tanto, lo entiendo como una responsabilidad bastante colectiva.

Además, creo que viniendo desde regiones es muy bonito poder representar a ese espíritu regionalista desde la presidencia y que sea una persona que no viene del centro de Chile. Creo que el trabajo, inicialmente, -incluso quizás sin buscarlo, porque fueron pocas las horas en que se definió que iba a hacer la candidata-, luego de asumir la presidencia, y que la asumo, se ha dado un contraste bien grande, entre los dos procesos.

Es un contraste natural, quizás por la forma en que los cincuenta consejeros se han tomado distinto también el proceso, y ha sido, ya a nueve semanas, gratificante saber que uno está entregándose para ojalá proponerle un buen texto constitucional a los chilenos.

-¿Cómo ha visto a la ciudadanía en este proceso constitucional? Se siente un cansancio en la sociedad, ya sea por dos procesos constituyentes consecutivos como también por todo lo que ha acontecido en la política nacional este último tiempo. Sin embargo ¿Cómo evalúa usted lo que fue el mes de la participación, dicho ejercicio democrático?

-Sí, a mí me parece que fue muy interesante que existiera al comienzo del Consejo Constitucional un mes de Participación Ciudadana. Uno, porque refuerza el carácter ciudadano del consejo constitucional. (…) Nuestro sello es que somos representantes ciudadanos, y me parece que ese sello venir a complementarlo con participación directa de la ciudadanía era muy bueno.

Fue una buena oportunidad por haber podido recibir nosotros mismos también, audiencias públicas, la Iniciativa Popular de Norma, también está movilizando ciudadanía. Es importante decir cuáles son esos temas que le generan mayor cercanía o qué los mueve con más fuerza.

Hay un muy buen balance de ese mes de Participación Ciudadana, insumos que están aquí en mi escritorio, que son siempre de revisión (…) Toda esa información que puede aportar es muy rica para poder tomar definiciones.

-Entonces, para la ciudadanía, sí se están tomando en cuenta sus indicaciones…

-Sí, claro, al menos en mi escritorio es un insumo permanente y creo que además permite, -yo sé que la ciudadanía tiene distancia en el proceso, como tú decías, hay cansancio, le llamaría también frustración, creo que los chilenos tenían muchas esperanzas puestas en el proceso anterior, un proceso que fracasó finalmente, algo con lo que nosotros cargamos-, en las semanas que han pasado de trabajo y en lo que se venga, que podamos dar cuenta de que se hace un trabajo con un sello distinto, con un sello de responsabilidad, de seriedad, de tomarse muy en serio el trabajo que estamos haciendo.

Tenemos un desafío también de acercar a la ciudadanía al proceso. (…) Espero que en las próximas semanas podamos ver la introducción de reclamos al texto (de los expertos) que le hagan sentido a la ciudadanía y genere cercanía.

-Ahora se viene y se está en el trabajo de conversar sobre las enmiendas, la instancia deliberativa entre los consejeros y consejeras ¿Hay diálogo realmente entre las bancadas?

-Hay diálogo. Hay diálogo, o sea, hace dos semanas se anunció esta mesa de trabajo, de conversaciones con los seis delegados y un acompañante que podía ser otro consejero, un asesor, etcétera. Por lo tanto, hay diálogo. Esas son reuniones que se están dando, se están gestionando, también se ha dado en las comisiones. Podemos estar de acuerdo o no estar de acuerdo, pero el diálogo existe.

-Respecto a la información que dice que el Partido Republicano está tomando un camino similar al que hizo fracasar a la anterior Convención Constituyente, como, por ejemplo, enmiendas identitarias ¿A quién le está dando voz el Partido Republicano? ¿A sus votantes o intenta hacer una radiografía de la sociedad lo más amplia posible?

-Hay dos elementos de tu pregunta. Lo primero es que yo entiendo que hay personas que pueden tener algún interés en revivir lo que fue. Sin embargo, en las enmiendas ciudadanas que impulsó el Partido Republicano no está más lejos de eso.

Nosotros no venimos a refundar, ni levantarnos como una esfinge de la moralidad. Por tanto, hay una gran distancia entre el Partido Republicano, lo que ha estado haciendo la derecha en el proceso constitucional, y lo que fue el Frente Amplio, la Lista del Pueblo y otros grupos en el proceso anterior.

En segundo lugar, las enmiendas republicanas son enmiendas ciudadanas que recogimos en campaña, de cuáles son los temas que más afligen a la ciudadanía. Nosotros sí fuimos electos por muchos republicanos, pero también hay muchos independientes que votaron por el proyecto que creyeron que nosotros podíamos proponer o defender para Chile.

-Pasemos a las Regiones: ¿Piensa que la enmienda de disminuir los escaños para la Cámara de Diputadas y Diputados pueda afectar a la descentralización?

-Una de las propuestas es que en el Senado todas las regiones tengan un número de representantes. Eso no puede sino más bien que facilitar o promover la descentralización en el sentido de que todas las regiones tengan la misma representación.

Y ahí hay que hacer la diferencia en cuál es el objetivo de representación que tienen la Cámara de Diputados y el Senado, pero me parece que una idea como esa de dejar en igualdad de comisión a todas las regiones no hace más que generar efectivamente igualdad entre ellas y fomentar la descentralización en el sentido de que las políticas públicas que salgan del Congreso tengan una mirada de todas las regiones.

-En ese sentido ¿Cuál es la importancia que adquiere la descentralización en el Proceso Constitucional?

Uno de los capítulos del anteproyecto, incluso, se hace cargo de los gobiernos locales y municipalidades, gobiernos regionales, etc. Y me parece que hay un gran énfasis, y es transversal, en la preocupación por un Chile en que todos se sientan parte y que tal vez una si eres de Arica, de Biobío, o de Osorno, o Punta Arenas, tengas oportunidades para desarrollarte.

Nosotros tenemos propuestas que hablan de darle preferencia a lo local, o sea, que las decisiones se partan tomando en lo local. (…) Y no solo descentralización, porque si hablamos mucho de descentralización respecto a la región metropolitana, también tenemos un centralismo intrarregional, por llamarle de alguna forma.

-En la campaña del Partido Republicano se habla de reconstruir Chile ¿Qué significa aquello? ¿Dónde está roto el país?

-Yo creo que Chile tiene que retomar el camino del crecimiento social y económico. Y eso es reconstruir Chile. Eso es un volver a ponerse de pie. Eso es un volver a poner a las personas en el centro. Es un volver a hacer política con P mayúscula, a llamarle de alguna forma. Eso es reconstruir Chile. Y va vinculado también a la crisis moral de la que hablamos al comienzo, en el discurso inaugural del Consejo, de ese tejido social roto.

-¿Y qué está pasando en la sociedad chilena? ¿Cómo lo podría definir en un concepto? Si es que es uno…

-Yo creo que hay una tremenda frustración.

-¿De qué?

-Frustración de ver que, realmente, mientras más te esfuerzas, más difícil se te pone la cancha. Frustración, yo creo que el concepto es frustración. Hay cansancio.

-¿Estamos en una crisis institucional? A raíz de todo lo que está ocurriendo, por ejemplo, con el Caso Convenios:

-Sí, a ver, yo creo que Chile ha vivido una crisis institucional, una crisis social, una crisis económica, y eso es parte de lo que tenemos que trabajar todos. Aquí no es que los republicanos traigamos la varita mágica que soluciona, sino que, al contrario, somos todos, en este caso los 50 consejeros, pero también hay un país, hay instituciones que tienen que poder forjar acuerdos que permitan dar la respuesta a los chilenos.

-¿Pero usted cree que ahora estamos en una crisis institucional?

-Yo creo que Chile vive una crisis institucional, sí.

-¿Cómo ve el Chile de aquí a unos 30 años?

-¿Cómo lo veo o cómo me gustaría?

-Cómo lo ve y le gustaría que fuese…

-Creo que va a depender mucho de lo que pase en los próximos meses. Creo que decir “Chile va a ser así en los próximos años” es muy difícil porque hay mucha incertidumbre todavía. Espero que en los próximos años tengamos un Chile de oportunidades: que todos los padres puedan escoger la educación de su hijo, no solo quienes tienen la posibilidad económica. Me imagino un Chile en que haya acceso a la salud y sea oportuna, no solo que haya, sino que llegue a tiempo.