Presidente del Senado, Juan Antonio Coloma: “Estamos convencidos de que es el momento de que el Estado retome su fuerza y enfrente con decisión la tarea de recuperar la seguridad del país”.
El presidente del Senado, Juan Antonio Coloma, en conjunto con su par de la Cámara de Diputados y Diputadas, Vlado Mirosevic, presentaron una contundente propuesta legislativa compuesta por 31 proyectos sobre seguridad que serán discutidos y trabajados por el Congreso en el plazo de 75, 150 y 365 días.
Esto en el marco de las álgidas semanas que se han vivido en el país en lo que refiere a la falta de seguridad, marcadas por hechos delictuales graves como el asesinato a 3 funcionarios de Carabineros y enfrentamientos crudos contra la delincuencia.
Al respecto, la ministra del Interior, Carolina Tohá, luego de una reunión con los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados y Diputadas, señaló que “le damos el mayor valor a este acuerdo que hemos logrado con los presidentes de ambas Cámaras. Es un acuerdo entre el Ejecutivo y el Legislativo, pero es también un acuerdo entre representantes del oficialismo y representantes de la oposición”.
Además, desde el Gobierno informaron que, en conjunto con los presidentes de ambas Cámaras, “se comprometen a impulsar esta agenda con urgencias y sesiones legislativas extraordinarias, así como a propiciar los acuerdos que sean necesarios para viabilizar los proyectos ante la prioridad que la ciudadanía nos demanda en esta materia”.
En ese contexto, parlamentarios de la Región del Biobío manifestaron una mirada positiva del trabajo que comenzará dentro de los próximos días. En esa línea, el senador Sebastián Keitel (Evópoli), dijo que “el mensaje más importante que estamos dando es que el Congreso está escuchando a la ciudadanía, dándole el máximo de celeridad a la que es hoy la primera prioridad nacional: recuperar la seguridad”.
El senador de la República, Gastón Saavedra (PS), comentó que “nuestro país vive en medio de tres inseguridades: la inseguridad pública, social y económica. Para la seguridad pública, debemos tener grandes acuerdos, como el que se ha logrado hoy día en La Moneda”.
A lo anterior, agregó que estos acuerdos políticos permiten el respaldo necesario para que los procesos legislativos se realicen de forma óptima, y evita, en gran parte, fracciones entre las fuerzas políticas que sin duda demorarían los procesos.
Además, el senador Saavedra, hizo hincapié en que los proyectos a los que se les debe dar una mayor agilización legislativa son a los que involucran cambios estructurales. Por ejemplo, “el nuevo Ministerio de Orden y Seguridad Pública, que tiene que ver la luz prontamente. La Agencia Nacional de Inteligencia, la Central de Investigación. Tenemos que anticiparnos a los hechos delictuales”.
Sobre la urgencia que requieren ciertas materias, el senador Enrique Van Rysselberghe dijo que “es fundamental avanzar rápido en proyectos que mejoran y dan mayores atribuciones a la Fiscalía y las policías para la persecución de delitos de alta connotación social, como son el de crimen organizado y narcotráfico”.
En esa misma línea, la diputada María Candelaria Acevedo (PC), indicó que “hay proyectos interesantes y van en la línea de lo que hemos señalado en más de una ocasión, como lo es un nuevo sistema de inteligencia”.
Sin embargo, dejó expresar que “me parece que la premura con la que se quiere legislar puede resultar contraproducente ya que la celeridad no siempre va de la mano de un trabajo bien realizado (…) No queremos estar parchando, y mucho menos arrepintiéndonos después por una ley mal hecha”.
La diputada Acevedo se refirió también a lo que se vuelve necesario para la Región del Biobío en materia de seguridad, señalando que “puedo insistir en la inteligencia, en dotar de mejores herramientas a las policías para que puedan investigar y realizar acciones preventivas, más que reactivas. Otro punto importante a considerar es la de fortalecer el tejido social, construyendo comunidad”.
Sobre la seguridad en la Región, uno de los puntos de ansiedad actuales a nivel país, compete a la lista de comunas que cubrirá el Plan Calle Sin Violencia, las cuales aún no han sido confirmadas por el Gobierno. Cabe recalcar que este proyecto se focalizará en las comunas del país que concentran el 50% de los delitos violentos a través de una inversión de recursos de US$1.500 millones anuales en régimen.
Sobre lo anterior, el senador Sebastián Keitel dijo que lo que hace falta es que se considere a varias comunas de la Región en dicho Plan. “Asimismo, necesitamos mayores recursos para nuestras policías que hoy no cuentan con la suficiente cantidad de vehículos para realizar su labor”, explicó.
Por su parte, y en relación al “Fast Track” para la seguridad nacional, el senador Enrique Van Rysselberghe indicó que “todas estas modificaciones ayudarán a mejorar la percepción de seguridad entre los habitantes de la región del Bío Bio, al igual que en el resto del país. Ahora, no es ningún misterio que nuestra región necesita más recursos para la seguridad y la persecución penal”.
La lista de la agenda legislativa” considera proyectos que actualmente están siendo tramitados y otros que serán ingresados con el objetivo de priorizar su trabajo en el congreso y despacho dentro de 75 días, 150 días o antes de fin de año, lo que variará según el estado de las tramitaciones y la complejidad de cada materia.
Desde el Ejecutivo informaron que los proyectos que están listos para ser despachados dentro de los próximos días refieren a la ley que sanciona los actos preparatorios de sicariato; Ley de delitos económicos, que modifica diversos cuerpos legales para ampliar la responsabilidad penal de las personas jurídicas, y regular el ejercicio de la acción penal, respecto de los delitos contra el orden socioeconómico que indica.
Y, además, se agrega la modificación de la ley N°20.931, para otorgar a Carabineros facultades para requerir documentación migratoria y poner a disposición de la autoridad contralora a quienes no pueda acreditar regularidad.
A esto se le suman 13 proyectos a despachar dentro de los próximos 75 días, ocho que se buscan ser despachados en el plazo de 150 días y siete proyectos que se busca tener listos antes de que acabe el año.