La próxima semana se debería analizar en la Cámara de Diputados y Diputadas el proyecto que permite el resguardo de Infraestructura Crítica a las Fuerzas Armadas. Lo anterior, porque hasta ayer, la iniciativa que fue aprobada el miércoles por amplia mayoría en el Senado, no estaba considerada en tabla.

Pese a ello, la conversación entre los parlamentarios ya partió, y ya se vislumbra un escenario muy diferente al de julio del año pasado, cuando con votos de rechazo de los sectores de la derecha y algunos del propio oficialismo, el proyecto fue rechazado.

“El proyecto sobre Infraestructura Crítica que fue aprobado por el Senado va a tener un amplio respaldo en la Cámara de Diputados. Vamos a superar la lamentable decisión que se tomó hace unos meses, en que sectores de derecha y de izquierda desecharon el proyecto que es una alternativa al Estado de Excepción”, manifestó el diputado y jefe de bancada de la DC, Eric Aedo.

La propuesta recién aprobada permitirá al Ejecutivo disponer, entre otras cosas, que las Fuerzas Armadas se desplieguen en las zonas fronterizas. De hecho, la urgencia en su tramitación tenía que ver con este, más allá de lo que ocurre en la Macrozona Sur, aunque también será aplicable.

El proyecto precisa que infraestructura crítica serán todas aquellas instalaciones físicas estratégicas y que prestan servicios básicos en temas de abastecimiento, telecomunicaciones, salud, centrales eléctricas, entre otras.

De acuerdo a lo establecido en el proyecto, las Fuerzas Armadas que cuidarán las fronteras podrán solicitar su identificación a quienes crucen por pasos no habilitados. También podrán registrarlos y eventualmente detenerlos y ponerlos a disposición de las policías.

El senador del PS, Gastón Saavedra, explicó que hay diferencias con el proyecto rechazado en julio de 2022. Entre otras cosas, la actual iniciativa, dijo, también alude a las fronteras, define conceptualmente Infraestructura Crítica y se establece un plazo de 90 días. Además, incorpora “los derechos fundamentales de las personas como conceptos. Es decir, los derechos humanos van a estar salvaguardados en este tipo de situaciones. Y junto con eso, el uso del fuerza está regulado, así como dónde actúan las Fuerzas Armadas”.

La diputada del PC, María Candelaria Acevedo, y su colega del PEV, Félix González, fueron dos de los representantes de la Región que votaron en contra de la iniciativa el año pasado.
Consultados al respecto, el último manifestó que mantendrá su voto contrario, pues se trata de “un exceso, que se aparta de la lógica del control”.

Insistió en que las medidas deben ser excepcionales y agregó que se “trata de una innovación mundial que sale de toda lógica. Se pretende instalar un Estado militar, pero con funciones policiales”.
La parlamentaria, quien no estuvo en la votación, aunque manifestó su opinión contraria, dijo que lo importante es que el proyecto constituya un aporte en materia de seguridad. Enfatizó, además, en la importancia de no afectar “los derechos fundamentales como consecuencia de la presencia de las Fuerzas Armadas en labores de protección a la infraestructura”.

La parlamentaria comunista dijo que está analizando el tema y entre los temas que le interesa que haya claridad, están la definición “del concepto de infraestructura crítica, y como este se ve reflejado en el territorio; y diferencias de control de orden público y labores de protección de infraestructura crítica por parte de las Fuerzas Armadas”.
Por lo anterior, no quiso adelantar un eventual voto a favor o en contra.