Parlamentarios y representantes de la pesca artesanal e industrial entregaron su visión sobre lo que debería contener la normativa que regule al sector en caso de que se tenga que legislar nuevamente sobre esta materia.
Va camino a ser una realidad, al menos eso parece hasta ahora, luego que la Cámara de Diputados y Diputadas ratificara el proyecto de ley que declara nula la actual ley de pesca (N°20.657).
La iniciativa pasó ahora a segundo trámite legislativo en el Senado, donde se tendrá que discutir y ser votada.
Pero dado el avance que ha logrado el proyecto, es probable que termine ratificada igualmente, lo que significará que habrá que crear un a nueva ley que regule al sector.
¿Qué debería contener esa nueva ley de pesca y acuicultura? ¿Cuál es el piso mínimo de contenido que parlamentarios y otros actores esperan que sean incluidos? A continuación las respuestas.
En el caso de los de María Candelaria Acevedo, diputada (PC) y presidenta de la Comisión de Pesca y Acuicultura, indicó que medioambiente y empleo son elementos esenciales y que debe estar incluida en la nueva propuesta para esta ley.
“Lo que debe contener y que buscaremos asegurar en la nueva ley de pesca, es la sustentabilidad del recurso (…) Asimismo, buscaremos que la propuesta logre defender el empleo, ya que la actividad pesquera en el país, y particularmente en el Biobío moviliza a más de 20 mil pescadores artesanales y 59 áreas de manejo, a lo que se suman a casi 40 mil puestos de trabajo que corresponden a la pesca industrial.
En tanto, el diputado Sergio Bobadilla (UDI) quien también forma parte de la comisión, opinó distinto, al menos en la necesidad de anular la actual ley, planteado que es mejor modificar la normativa vigente.
“Después de un tiempo de aplicación, todas la leyes pueden ser revisables, todas la leyes pueden ser perfectibles, pero de ahí a derogar una ley o anular una ley hay una diferencia no menor. Yo creo que debemos buscar los consensos necesarios que permitan provocar las mejoras y que queden todos los actores -involucrados en esta actividad tan importante para el país- satisfechos”, sostuvo.
Por su parte, el diputado Eric Aedo (DC), otro de los integrante de la comisión de Pesca, sostuvo que anular y tramitar una nueva norma es algo que se debe hacer.
“Este es un proceso necesario, necesario para el país, también para que contemos con una ley de pesca, que todo el mundo, que todos los actores, tanto los pescadores artesanales como los pescadores industriales, pero también la sociedad chilena entiendan que es una ley que está hecha con sentido social y que es una ley que no favorece solo a un sector de la sociedad, sino que a todo un sector pesquero”, comentó.
Desde el Senado, Enrique Van Rysselberghe (UDI), consultado por el tema, igual apuntó al componente medioambiental como un factor relevante ante la discusión de una nueva ley.
“Si el Congreso toma la decisión de legislar una nueva ley de pesca, creo que el centro debe ser la preservación de los recursos y especies en el tiempo, de manera de asegurar la continuidad en el tiempo de todo tipo de actividad pesquera en el país. Sería una mala decisión legislar dejando de lado la actual crisis climática y de biodiversidad que está afectando, a nivel mundial, los recursos pesqueros y que pueden terminar con la actividad de diversos grupos o gremios pesqueros en el corto plazo”, planteó.
Mientras, el senador (PS) Gastón Saavedra, explicó que para él es esencial que “una nueva ley cuente con la mayor participación posible de trabajadores y comunidades que viven de las riquezas del mar”. El parlamentario agregó que “hay que tomar las precauciones para que una nueva legislación sea sustentable y proteja a los trabajadores de este sector”. Por último el senador, sostuvo que “la actual legislación es uno de los proyectos más controversiales que han pasado por el congreso, que incluso significó que varios personeros políticos desfilaran ante los tribunales de justicia y por eso es que el país necesita una ley nueva”.
Desde una de las organizaciones de la pesca artesanal, Hugo Arancibia, presidente de la Ferepa Biobío, indicó que una nueva ley de pesca debe mantener parte de la estructura de la actual, en lo referido a la protección de su sector y de los recursos.
“Creo que es importante mantener el tema de las 5 millas entre el sector artesanal y el sector industrial, mantener la milla para embarcaciones menores de 12 metros de eslora, mantener el seguro de vida, la certificación de las capturas, la asignación de cuotas mediante un comité técnico-científico y la creación de un modelo de desarrollo de la acuicultura creo que son alguno de los elementos de importancia que debiera contemplar la nueva ley. En el plano de la fiscalización creo que importante destacar el tema del posicionador satelital”, precisó el dirigente.
Finalmente, para el sector de la pesca industrial, particularmente desde el gremio que los reúne en la zona (Asipes), su presidenta Macarena Cepeda, dijo que la anulación de la ley sería un paso atrás y que están dispuestos a aportar en el caso que se decidiera reformar la actual normativa.
“La actual Ley de Pesca ha demostrado su valor en varios aspectos, particularmente en cuanto a conservación y recuperación de las especies; no obstante, creemos que es perfectible y, por lo tanto, estamos trabajando en aportar en la discusión que se va a desarrollar en materia legislativa. Su anulación se discutió ya el año pasado y quedó muy claro que no es una alternativa, porque se trataría de un retroceso para el sector pesquero. Lo que sí está claro es que antes hay que trabajar una nueva legislación con todos los actores”, cerró la representante gremial.