Un mes se cumplirá mañana de la disolución de la Convención Constitucional y desde que los ex convencionales comenzaron a difundir el texto surgido en la instancia.

Uno de ellos es Adolfo Millabur, quien está trabajando en conjunto con el resto de los ex constituyentes de Pueblos Indígenas, se ha trasladado a distintas comunidades para poder abarcar las cerca de tres mil que existen en el país. “Para nosotros no es posible ir comunidad por comunidad en los días que nos queda. Entonces siempre le pedimos a los dirigentes que congreguen, que convoquen a varias directivas de comunidades”, comentó.

Y agregó que “nuestro compromiso es llegar hasta el 4 de septiembre, por lo menos a cada lugar que nos requiera, ya sea personalmente o pedirle a un convencional de pueblo indígena. Y en caso de que estemos todos ocupados, le pedimos a un convencional que está también por el Apruebo concurrir al territorio”.

Una de las principales consultas que surgen en las reuniones en las que participa Millabur se relaciona con la plurinacionalidad.

“Se tiene una especie de desazón por tanta mentira que ha circulado y de tan mala manera que se ha tomado la plurinacionalidad, la interculturalidad, la justicia indígena. La gente se da cuenta que lo que están planteando en la Constitución no es nada de revolucionario, simplemente están constatando una realidad. Entonces, ese sentimiento de percibir, de que son solo como el integrante de la familia y que a veces se quiere esconder y creo que Chile tiene esa disyuntiva de reconocer que somos todos parte de este territorio”, comentó.

El ex alcalde de Tirúa acusó que “recurrir al indigenismo como algo negativo ha servido como una cortina de humo para no debatir los temas que efectivamente la Constitución aborda, que son la descentralización, la desconcentración del poder y que también tiene que ver con la profundización de la democracia, sobre todo, en materia de participación vinculante de la población”.

Y apuntó a algunos de sus ex colegas, ya que “ellos saben que el país no ha tenido un giro así como revolucionario en materia indígena, pero lo utilizan de manera mañosa porque saben que la población chilena probablemente le hace ruido el tema indígena. Entonces ellos explotan eso para fines electorales. Pero el tema indígena no va a alterar el funcionamiento del Estado”.

Otros temas que se ha tomado la contingencia, han sido los llamamientos de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM) y su postura ante el proceso constitucional. “Es extraño porque la CAM, que lidera (Héctor) Llaitul se declaró contrario a este proceso desde su inicio; y los Republicanos, que los encabeza (José Antonio) Kast, también se declararon en contra. Hay una extraña coincidencia con quien vota Rechazo ya que es un indicativo para cómo estamos razonando, para el futuro de nuestro país, ya que ambos liderazgos están en contra del proceso de la nueva Constitución”, comentó.

Y complementó que “hay varios artículos que dice responsablemente que el tema de los pueblos indígenas se tiene que resolver a partir de un inicio, con una partida. De ahí vendrán mecanismos legislativos, de ahí vendrán política pública, de ahí vendrán participación política para que se vaya disipando esta dificultad de convivencia que tenemos en nuestro territorio”.

Millabur acusó que “ellos (CAM) no están leyendo el proceso histórico que estamos viviendo, no están entendiendo este proceso histórico, por lo tanto, no nos importan las consecuencias que tengan de los actos que puedan tomar ellos. Eso no, no lo están mencionando y por cierto que tienen realeza en todo el ambiente porque ponen la animadversión en la población y colabora con Rechazo”.

En relación a cuánto representa esta propuesta para su comunidad, Millabur indicó que “para el pueblo mapuche ofrece un camino, una ruta de resolver los temas de mediano y largo plazo. No hacer al día siguiente, ni el año siguiente, ni a este gobierno. Hay que implementar la Constitución porque empiezo a hablar de la participación política en todos los niveles de carácter colegiado, nacional, regional y local”.

Cerró con que “no hay institucionalidad que responda al conflicto que está viviendo la comunidad mapuche con el Estado”.