Hubo algunas sorpresas, como la falta de regularización de los terrenos, donde se emplazaban las viviendas siniestradas y que sus propietarios pidieron revisar.
Más allá de las críticas que se deslizaron al gobierno, por la presentación de una querella por el delito de incendio, la reunión entre quienes perdieron sus viviendas en un ataque incendiario que se produjo en Contulmo (la noche del viernes 2 de abril) y la delegada presidencial del Biobío, Daniela Dresdner, dejó un par de antecedentes hasta entonces desconocidos.
En efecto, en la cita las víctimas reconocieron que los terrenos, en los cuales se emplazaban las viviendas siniestradas, no están regularizados. De hecho, la delegada lo comentó y dijo que se buscarán algunas soluciones.
De la misma forma, consultada al respecto, dijo que no existía claridad respecto a los montos con los cuales concurrirían en ayuda de las familias, y que iba a depender “del nivel de destrucción. Es algo que se va a definir caso a caso”.
Mario González, vocero de la Junta de Vecinos del sector Los Robles, en Contulmo, y uno de los afectados con el incendio, dijo que “hay agentes externos que han llegado a alterar nuestra convivencia en nuestra zona, lo que es preocupante”.
Manifestó su “esperanza” en que la actual administración de gobierno pueda contribuir a “calmar la alterada convivencia que tenemos hoy en la zona de Arauco, en La Araucanía es otro problema”.
González dijo entender que no se puede estar en todos lados, pero fue el Estado el que falló en la situación del siniestro y, en ese sentido, es quien debe responder respecto a las reparaciones.
De hecho, lo vecinos solicitaron una compensación económica respecto “de la pérdida patrimonial” y una petición al “ministerios de Bienes Nacionales para que nos regularice esos terrenos, y ver la posibilidad de habitar nuevamente. Nosotros no vamos a abandonar nuestro territorio, son terrenos que nosotros despejamos y construimos”, dijo González.
Otro hecho particular, tiene que ver con las declaraciones del dirigente, al momento de ser consultado por la sensación que tienen los vecinos mapuches, con quienes conviven, respecto de los hechos de violencia.
En respuesta a lo anterior, González dijo que era “difícil de analizar, porque existen personas que quieren reinvindicar una causa y están los que quieren seguir sacando madera libremente para entregarla a la planta celulosa Arauco, que es como el caramelo en nuestra zona (…) Alguien tiene que estar financiando y ser beneficiario de toda esta tole tole. De dónde sacan recursos para comprar armas, incendiar, moverse… Habrá que decirle al Estado que investigue. Nosotros lo único que queremos es seguir conviviendo con el pueblo mapuche”.
El dirigente dice que hay temor. “Nadie dice nada de la industria forestal, por ejemplo. Los gestos que debieran dar, porque su riqueza, está ahí debieran ser mucho más elocuentes”, enfatizó.