En las últimas semanas uno de los temas que ha marcado la pauta al interior del Consejo Regional (Core) se relaciona con la actualización del reglamento interno.

Se trata de un trámite que estaba pendiente desde la promulgación de la Ley de Fortalecimiento de las Regiones, pero con la asunción del gobernadores, Rodrigo Díaz, y la petición de algunos representantes, la instancia espera ponerse al día.

De hecho, la máxima autoridad explicó que a petición de la comisión de Gobierno, parte de su equipo, encabezado por el jefe de la División de Presupuesto e Inversión, Rodrigo Sandoval, elaboró una propuesta, incluyendo algunos dictámenes de Contraloría y “otras leyes vigente”.

Si bien es cierto, la polémica se centró en la eventual fusión, desaparición y creación de comisiones, hecho que finalmente ocurrió (el Gore proponía seis para que tuvieron un interlocutor en las divisiones), la votación del nuevo reglamento interno contará con un artículo que cambiará para siempre el trabajo que, incluso hasta la fecha, realizan los consejeros regionales.

“No se trata de una innovación es una aplicación de ley. La ley establece que ahora los Gobiernos Regionales aprueban marcos presupuestarios, es decir, un conjunto de materias que puedan ser tratadas. Y cuando los proyectos son inferiores a 7 mil UTM (un poco más de $379 millones), podemos aprobar directamente, atendiendo que el marco fue aprobado. Si la cantidad supera las 7 mil UTM, necesariamente tiene que ser votado por el Consejo”, explicó el gobernador.

Comentó, además, que independientes del monto, todas las subvenciones tiene que ser aprobadas por el Consejo.
Agregó que “lo importante es que tengamos un reglamento que responda a las necesidades de buen trabajo dentro del seno, tanto de las comisiones, como de la sesión plenaria”.

El consejero Luis Santibáñez dijo que, efectivamente, se trata de una disposición legal. De hecho, comentó otras regiones ya han establecido es nueva forma de definición.

Pero eso no es todo.

Hay otros temas de forma, pero revisten señales importantes. Por ejemplo, aún se consideraba la figura del Intendente, y no la del Gobernadores regional. Para efectos de redacción, en tanto, se incorporó la mirada de género, por lo que en ciertos párrafo se leerá “consejeros y consejeras regionales”.

En términos prácticos, la comisión de Gobierno acordó que bastará la coincidencia de cinco representantes de la instancia para llamar a sesión extraordinaria y abordar las temáticas más variadas. De hecho, este fue uno de los puntos por lo cuales transversalmente se optó por eliminar la comisión de Fiscalización (solo se opuso el core Javier Sandoval).

“En mi experiencia, y voy a iniciar mi tercer periodo, la comisión de Fiscalización jamás ha funcionado, porque depende del rol político del consejero o consejera que preside. Por eso, desde de Ancore, propusisimos un control interno que va a estar”, comentó al consejera Tania Concha (PC).