Cristian Puentes Rivas
Administrador Público, 30 años, Independiente (Evopoli)
¿Qué opina de la actual ley de descentralización? ¿Cree que se debe seguir perfeccionando?
La figura del gobernador regional es un gran paso, pero es el primero de muchos más que hay que dar, ahora corresponde avanzar en el traspaso de más competencias y gradualmente, disminuir las atribuciones del delegado presidencial, de tal manera que nunca se produzca entre ambos una disputa.
Este traspaso debe ir acompañado junto con otorgar autonomía respecto la toma de decisiones a las regiones, para que las medidas presupuestarias sean tomadas en la región por el gobernador, quien responde a los ciudadanos que lo eligen, no como el delegado presidencial, que responde al presidente.
¿Qué medida inmediata apoyaría en materia económica?
Ni un peso más de impuesto a las Pymes, todo lo contrario, debe haber una modernización en el Estado para que todos los instrumentos, especialmente los que vienen de la Corfo o el ministerio de economía tengan un sentido de urgencia, de tal manera que las pymes nunca estén al servicio del Estado, sino más bien, el Estado al servicio de las pymes. Por otro lado, disminuir la burocracia para comenzar a operar los emprendimientos, yo impulsaría permisos temporales de funcionamiento semestral, de tal forma que la pyme pueda funcionar, generar empleo y posteriormente, se formaliza la situación para un funcionamiento permanente.
¿Qué opina del actual sistema previsional? ¿Lo cambiaría, lo modificaría o lo dejaría cómo está?
Lo modificaría sin duda, hay que introducirle mayor competencia y sobre todo, garantizar libertad para que las personas decidan dónde y quién quiere que le administre sus fondos.
En su opinión, en materia científica, energética y medioambiental, ¿hacia dónde debe apuntar nuestro país?
El país y particularmente la región del Biobío, debe creerse el cuento de ser una ciudad universitaria y de esta forma generar instrumentos y mecanismos de colaboración entre las ciudades, para abordar problemáticas contingentes y así situar a la región como un gran polo de desarrollo científico, intelectual y académico.
En materia energética optimizar el uso de energías no convencionales, especialmente en el Biobío.
Finalmente, no más zonas de sacrificio, impulsar una transformación en materia medioambiental, reformar el SEIA para que sea una institución de vanguardia.
La pandemia dejó al descubierto las deficiencias en el área cultural. ¿Qué propone usted para cambiar la dependencia de los fondos concursables por parte del mundo cultural?
Lo que ha ocurrido con la creación del Ministerio, es un buen ejemplo de los placebos que muchas veces se generan en políticas relativamente bien o mal implementadas. Se creó un ministerio de la Cultura, pero cuando uno les pregunta a las personas del rubro, se sienten solos, con un Estado que ha llegado tarde.
La ley de Donaciones Culturales está enfrentando un proceso legislativo, este debe generar incentivos para que exista más donación y no sea sólo una rebaja de tributos. Las empresas que estén interesadas en donar a través de esta ley, puedan hacerlo de forma ágil, flexible y generando valor compartido entre el mundo de la cultura y los donantes.
¿Qué propone usted para el desarrollo de infraestructura deportiva en regiones?
Aquí uno observa con claridad y con nitidez los efectos del centralismo excesivo que existe en el país. De la estructura total de infraestructura y edificios deportivos, más del 40% están concentrados en la región Metropolitana. Urge impulsar una política descentralizada, no es posible que, por esto, existan deportistas de primera y segunda categoría en el país.
Hay que abrir el abanico, que otras nuevas disciplinas emergentes, como el hockey o padel, cuenten con sus propias instalaciones y no tengan que adaptarse a las de otros deportes.