Definición de la presidencia y la forma acerca de cómo funcionarán serán parte de las decisiones que tendrán que tomar los 155 integrantes de la instancia en su primer encuentro ya juramentados. Hoy, a contar de las 10 de la mañana
Llegó el día que muchos esperaban desde la noche del 15 de noviembre de 2019, cuando un grupo transversal de políticos firmó un acuerdo para buscar una solución no violenta a la serie de protestas que sacudían al país.
A contar de las 10 de mañana en la sede del ex Congreso en Santiago se concretará el juramento de los 155 convencionales constituyentes que se encargarán de redactar la nueva carta fundamental que regirá los lineamientos jurídico-políticos del país.
La ceremonia que se realizará en los jardines del recinto emplazado en la calle Catedral, en la que estarán presentes todos los convencionales y será la secretaria de Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel), Carmen Gloria Valladares, quien les tomará un juramento común a todos ellos. Después tendrán la opción de emitir un breve discurso que no se podrá extender más allá de los 30 segundos.
Aún no estaba definida si durante esta actividad se respetará la ritualidad de los pueblos originarios, como Mapuche y Aymara, que fue solicitada al secretario técnico, Francisco Encina, esto a pesar de las constantes conversaciones que han existido durante la semana.
Tras el juramento, los 155 integrantes deberán tomar las primeras determinaciones. La primera de ellas se relaciona con quien liderará la Convención. Hasta el minuto existe una danza de nombres en todos los sectores y se augura que la votación tenga una amplia dispersión, que podría favorecer a Chile Vamos.
En lo que sí habría acuerdo, más que en el nombre, es en las cualidades que debería tener el timonel. Todo apunta a que sería una mujer, “ojalá apartidista y de región”, dijeron fuentes consultadas.
Elisa Loncón, Patricia Politzer, Elisa Giustinianovich, Cristina Dorador, son algunos de los nombres que han surgido.
Se decidió entre los distintos participantes, que esta presidencia sea rotativa entre las distintas fuerzas mientras esté vigente la Convención. En relación a las vicepresidencias, se está pidiendo que sean siete y así estén representadas todas las sensibilidades políticas. En la actualidad es sólo una.
Otro acuerdo al que deberán llegar bajo la regla de los dos tercios es la forma en que funcionará la Convención. Esto se relaciona con cómo serán las sesiones, horarios, entre otras situaciones.
Por ejemplo, durante la primera semana ya se acordó que se trabajará en “horario laboral”, es decir, de lunes a viernes entre las 9.00 y las 17.00 horas y de manera presencial.
Pero se deberá definir cómo serán el resto de las sesiones: presencial, telemáticas o híbridas; si todas serán en Santiago o algunas en regiones, como están pidiendo parte de los convencionales. En esta situación se debe analizar las características de la zona, si también serán presenciales o mixta, además de la logística que implica.
Algunos de los convencionales de la Región propondrán que, al menos, una sesión sea realizada en la zona en forma presencial, puesto que existe la capacidad logística para la recepción de un evento como este.
“La inauguración de la Convención Constitucional es un hito histórico de nuestra historia republicana. Nos hemos articulado con numerosos constituyentes para asegurar que el evento sea austero, simbólico e intercultural. Espero que sea un momento de encuentro y reconocimiento de nuestra diversidad ante el gran desafío que nos espera.
En cuanto al reglamento, desde Apruebo Dignidad estamos trabajando propuestas e intercambiando opiniones con otros constituyentes, en miras a una Mesa Directiva que represente la diversidad de la Convención y un funcionamiento orgánico que permita abordar adecuadamente cada una de las materias constitucionales, así como la participación popular incidente durante todo el proceso.
Además, queremos definir que el funcionamiento de esta Convención sea compatible con la labores de cuidado de la familia y salir de lo opaco de la política”.
“Esperamos una ceremonia sobria, que represente a la mayoría que desea una Constitución transformadora. Un foco en los Derechos Humanos, en nuestras y nuestros muertos, especial mención al compañero Manuel Rebolledo de Talcahuano. A los y las mutiladas, al pueblo encarcelado en distintas zonas y a los presos del Wallmapu. Esperamos que se cumplan las solicitudes de las primeras naciones, en estricta observancia de los Convenios Internacionales.
El reglamento debe considerar la transparencia del proceso constituyente, sus actividades deben ser públicas y grabadas, estamos por transparencia absoluta. Participación vinculante, de organizaciones de base, asambleas y cabildos, el proceso surge desde la ciudadanía. La probidad y los conflictos de interés, vamos a elevar los estándares de probidad y las penas por infringirlos”.
“En cuanto a la ceremonia, las y los 11 constituyentes de Independientes No Neutrales llamamos a efectuar una ceremonia de instalación sobria, significativa, con sello republicano y de unidad que represente a las 155 personas que fuimos electas. Creo que estamos a completa disposición de generar un ambiente dialogante y próspero para llevar a cabo el gran mandato encomendado: escribir nuestra Nueva Constitución.
En cuanto al reglamento, espero que seamos capaces de ponernos rápidamente de acuerdo para sacar un primer instrumento que se haga cargo de aquellas cosas urgentes y básicas que nos permitan comenzar rápidamente a trabajar, tales como: días, horario y quórums para sesionar, forma de asistir (virtual y/o presencial), comisiones temáticas, comisión de probidad y comisión de participación, por decir algunas”.
“Lo primero fijar nuestro código de ética y dejar establecidas las normas del buen trato, más allá de nuestras naturales diferencias. Considerar en el reglamento el tema de la descentralización, para facilitar el bienestar de los convencionales constituyentes de regiones, también considerar género, pues las madres y padres necesitan mantener contacto físico con sus hijos.
Mucha claridad y transparencia respecto a los gastos del proceso: es mala señal que el encargado por el gobierno como secretario de la Convención tenga un sueldo superior a $7,5 millones mensuales, me parece poco respetuoso, pues es un tema crítico en Chile, es la inequidad en su máxima expresión. Este proceso en fondo y forma tiene que respetar el sentir de los chilenos y chilenas. Yo no necesitaba palacios ni seguridad, que implica altos costos, para construir un mejor país”.
“Espero que entre los convencionales constituyentes prime el deseo de dar una muestra de educación, amistad cívica y racionalidad. Veo sectores muy radicales que se están arrogando la representación de la mayoría de los chilenos asumiendo ideologías extremas, impositivas y hasta excluyentes de la identidad nacional que muchos chilenos valoramos.
Espero que desde el día uno se entienda que solo se nos mandató a escribir un texto y que el verdadero soberano es ‘la ciudadanía chilena’, que aprobará o rechazará en un año.
Los convencionales constituyentes estamos para trabajar bajo normas claras, no para exigir ni amenazar; menos para interferir en los otros poderes. Eso lo debe expresar el reglamento”.
Si bien Andrés Cruz no estuvo disponible para contestar las inquietudes de Diario Concepción, en ocasiones anteriores había adelantado que espera un debate con altura de miras y que no este centrado en las posturas más extremas que han surgido en los últimos días.
En efecto, en los encuentros virtuales que se han realizado, el abogado cuestionó las actitudes “asambleistas” que han tenido algunos de sus colegas, puesto que han existido “posturas vociferantes” por parte de los integrantes de la Lista del Pueblo.
Junto con lo anterior, Andrés Cruz se manifestó partidario de que sea una mujer y de regiones quien presida por primera la Convención Constitucional. También ha manifestado ser partidario de que la instancia encargada de redactar la carta fundamental realice sesiones de trabajo en regiones.
“Haber recibido el encargo y tener la responsabilidad de redactar la Constitución Política de nuestro país resulta una tarea de la mayor importancia política y social.
Espero, en consecuencia, una primera reunión de los convencionales constituyentes que sea muy formal y solemne. Respetuosa, además, de la tarea que se asume así como del marco constitucional que la rige”.