La Comisión de Educación de la Asociación Chilena de Municipalidades solicitó al gobierno postergar el retorno hasta el 15 de abril. Cuatro jefes comunales de la zona apoyaron la medida.
Según el cronograma del Mineduc el 1 de marzo debería iniciar el año escolar 2021. El seremi de Educación, Felipe Vogel, señaló que, ante un eventual retorno en dicha fecha, este podría desarrollarse de manera paulatina e “híbrida”, según la hoja de ruta acordada con cada establecimiento, situación que generó reacciones inmediatas por parte de los alcaldes de la zona.
Dentro de las problemáticas de un eventual retorno a clases estaría la mayor concentración de peatones y vehículos circulando por las ciudades, situación que es advertida por el alcalde penquista, Álvaro Ortiz, enfatizó que estas no deben llegar hasta que se acabe el riesgo para la comunidad educativa.
“El aumento de movilidad, especialmente en el transporte genera riesgos de contagios, estamos en pleno proceso de vacunación y las cifras siguen siendo complejas, lo peor es correr riesgos innecesarios”.
Por su parte, los jefes comunales de Talcahuano y Coronel argumentaron en la misma línea, señalando que al igual que otros municipios la decisión es no retornar a clases presenciales, pese a la calendarización del gobierno.
“Claramente Coronel no está en condiciones de retomar clases de forma presencial, principalmente frente a los altos números de Covid-19 que estamos atravesando. Todavía no hemos vacunado al 20% de la población y nosotros no vamos a arriesgar a nuestro personal”, indicó el alcalde Boris Chamorro.
En Talcahuano por su parte, el uso de colegios como sedes de vacunación sería uno de los argumentos utilizados para mantenerse en la negativa.
“Tenemos el inconveniente que estamos en pleno proceso de vacunación, donde la mitad de los establecimientos educacionales sirven como vacunatorio”, puntualizó Henry Campos.
Antonio Rivas, alcalde de Chiguayante, junto con mostrarse distante a la medida, sostuvo que en cualquier planificación que piense en un retorno presencial es importante pensar en aquellas actividades formativas donde los alumnos desarrollan otras habilidades, pero en las cuales la interacción puede ser una complejidad sanitaria.
“No me imagino actividades deportivas, culturales y artísticas con mascarilla. Éstas necesariamente necesitan interacción con los pares. No se trata de volver a clases presenciales para volver a una sala, estos son procesos importantes para llevar el proceso formativo y deben existir los protocolos correspondientes”, dijo Rivas.