Como es tradición en las elecciones municipales de la Región, nombres que perdieron pasadas elecciones volverán a competir en abril del 2021. El objetivo es claro: ir a la pelea con los jefes comunales vigentes y quedarse con el sillón municipal.
Durante los últimos años, un hecho que ha caracterizado a las elecciones municipales es la presentación de candidatos, que pese a perder con o sin claridad en los comicios, esperan los años respectivos para volver a presentarse en la elección siguiente. Algunos nombres han sido derrotados dos y hasta tres veces, pero vuelven a postularse.
En la provincia de Concepción, esta particularidad se ha convertido en una tónica y es frecuente ver como las cartas a alcaldes vuelven a intentar llegar al municipio de sus respectivas comunas. Este 11 de abril no será la excepción.
Uno de los lugares emblemáticos donde se repetirá esta tendencia será Talcahuano, donde el actual alcalde, Henry Campos (UDI), competirá nuevamente con Leocán Portus (IND, ex PPD). En esta oportunidad, a la contienda se sumará el concejal, Eduardo Saavedra (PS), quien en 2016 debió ceder su opción a Portus, que fue mejor evaluado en las encuestas de la entonces Nueva Mayoría. Hoy, Saavedra es el edil más votado de la comuna y debería representar a la Unidad Constituyente.
En Hualpén, la lucha municipal también será por partida triple. A la repostulación de la alcaldesa, Katherine Torres (IND), se volverán a sumar las candidaturas de Miguel Rivera (PPD) y Gabriel Torres (RN). Las tres cartas ya compitieron en 2016 y la alcaldesa se impuso a ambos candidatos por un estrecho margen del 2% de la preferencia de los votantes.
Chiguayante también tendrá una antigua contienda entre el alcalde José Antonio Rivas (PS) y Jorge Lozano (IND, ex PS). Si bien, la autoridad vigente le ha ganado en los dos periodos anteriores, Lozano le ha cortado distancia en los últimos comicios y espera dar el golpe final ahora que Rivas se presentará por última vez como candidato al municipio. A esta lucha hay que sumar a Jessica Flores (IND con apoyo de Chile Vamos), quien en 2008 compitió con el histórico alcalde, Tomás Solís (PS).
En Tomé, si es que hay otro tipo de definición, considerando la petición de Jonathan Hidalgo de una candidatura única de la oposición, la ex alcaldesa Ivonne Rivas (DC), volverá a competir con el actual jefe comunal, Eduardo Aguilera (IND, ex DC).
Ambos fueron correligionarios y fueron parte del mismo Concejo Municipal (Rivas fue concejal antes que alcaldesa, mientras Aguilera cumplía con unos de sus periodos a la cabeza del municipio). En la última contienda, Aguilera se impuso por un pequeño margen del 2% y le quitó la posibilidad a Rivas de seguir en el municipio otros cuatro años.
Mientras tanto, en Lota, el acalde actual, Mauricio Velásquez (IND), cercano al PS, ganó las primarias de la Unidad Constituyente e irá en búsqueda de la reelección. La tarea no es fácil, porque tal como aconteció en 2016, deberá competir con Patricio Marchant (IND, ex DC), que viene trabajando hace meses para recuperar el municipio que perdió, justamente, con Velásquez.
En Penco pudo repetirse otra contienda, pero este fin de semana la UDI anunció que su carta al municipio será Héctor Peñailillo.
Con este escenario, las elecciones municipales tendrán varios condimentos, principalmente, porque algunos ex alcaldes intentarán recuperar sus municipalidades y otros, tratarán de dar pelea para quedarse con el sillón municipal y dejar atrás viejas derrotas.