El 11 de abril de 2021 se deberá elegir a los constituyentes que integrarán el órgano encargado de redactar la nueva carta fundamental y que tendrá 9 meses para ello.
Tras el triunfo del Apruebo en el plebiscito nacional, la ciudadanía optó por entregar a la Convención Constitucional la misión de redactar lo que será la nueva Constitución que viene a terminar con la Carta Magna escrita en 1980.
Además del proyecto que busca reservar escaños para los pueblos originarios, que se votará esta semana en Sala, en el Senado se está discutiendo también una reforma para facilitar la participación de independientes en la Convención.
La elección de los constituyentes se realizará el 11 de abril de 2021 y el proceso de calificación de esa elección deberá quedar concluido dentro de los treinta días siguientes a la fecha de ésta.
En su primera sesión, la Convención deberá elegir a un presidente y un vicepresidente por mayoría absoluta de sus miembros en ejercicio.
Además, para aprobar las normas y el reglamento de votación de las mismas, deberá hacerlo con un quórum de 2/3 de sus miembros en ejercicio y también tendrá que constituir una secretaría técnica, la que será conformada por personas de comprobada idoneidad académica o profesional.
La Convención no podrá intervenir ni ejercer ninguna otra función o atribución de otros órganos o autoridades establecidas en la actual Constitución y que mientras no entre en vigencia la nueva Constitución, la actual seguirá plenamente vigente sin que la Convención pueda modificarla.
La Convención deberá redactar y aprobar una propuesta de texto de la nueva Constitución en un plazo de 9 meses contado desde su instalación. Dicho plazo podrá prorrogarse tres meses.
Una vez redactada y aprobada, la convención se disolverá de pleno derecho y sus integrantes no podrán ser candidatos a cargos de elección popular mientras ejercen sus funciones y hasta un año después de que cesen en sus cargos.
Cuando la Convención comunique que ha terminado su propuesta de texto, el Presidente debe convocar a un plebiscito nacional constitucional para que la ciudadanía apruebe o rechace.
En este caso, el voto será obligatorio para los que residen en Chile y en caso de que no voten, serán sancionados con una multa a beneficio municipal.
El día del plebiscito se le entregará al ciudadano una cédula electoral con la pregunta ¿aprueba el texto de la nueva constitución propuesto? y tendrá la opción de aprobar o rechazar.
Si se aprueba el texto propuesto por la Convención, el Presidente de la República deberá convocar al Congreso Pleno para que en un acto público en que se promulgue y se jure respetar y acatar la Carta Magna.
La nueva carta fundamental deberá imprimirse y repartirse gratuitamente para todos los establecimientos educacionales, públicos o privados, bibliotecas municipales, universidades y órganos del Estado.