El aumento explosivo de los casos de Covid-19 despertaron las alarmas en todo el país. El llamado a respetar las normas sanitarias es constante, y las autoridades son enfáticas en aumentar las sanciones a quienes violen estas medidas.

Sin embargo, también se han observado casos de autoridades que no cumplen con los protocolos establecidos por la autoridad sanitaria en el marco de prevención.

La imagen de la senadora y presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, en Los Ángeles marcó la polémica al ver a la parlamentaria en una actividad donde los presentes se encontraban sin mascarillas, y tampoco respetando el distanciamiento social.

El hecho traerá consecuencias ya que el seremi de Salud, Héctor Muñoz, señaló que “se va a investigar, es una situación que surgió a través de una foto, y por eso es materia de investigación. Es un tema de análisis, hay que ver las fechas y la normativa vigente”.

Hasta el propio Presidente Sebastián Piñera ha sido criticado por una supuesta violación al protocolo en el funeral de su tío, Bernardino Piñera. En la ocasión, el Mandatario abrió el féretro, y además imágenes constataron la presencia de más de 20 personas, superando lo permitido por la ley, aunque la subsecretaria Paula Daza sostuvo que se cumplieron los protocolos.

Los “malos ejemplos” de autoridades en el cumplimiento de las normas sanitarias continúan. El concejal de Providencia, Tomás Echiburú (RD), fue sorprendido infringiendo la cuarentena tras andar en skate. Además, el senador Rabindranath Quinteros (PS), realizó un viaje en avión sin esperar los resultados de su examen de Covid-19.

“Las autoridades en general no han estado a la altura de las mismas exigencias que ellos han interpuesto. Las normas están dadas por ley, se incrementan las penas para los infractores, pero lamentablemente de manera transversal nuestras autoridades no las han respetado”, señaló el analista político de la Unab, Felipe Vergara.

Vergara añadió que “quizás desde el punto de vista legal, el Presidente no infringe una norma, pero desde el punto de vista ético es muy descriteriado, porque la mayoría de la población no ha podido acompañar a sus deudos porque no se les permite y porque no corresponde. Los casos de Van Rysselbergue, Quinteros y Echuburú bordean la ilegalidad. Son bastante poco apegados al espíritu de la ley. Esto partió cuando el mismo Presidente se pasea y se saca fotos en Plaza Italia. Todo esto claramente daña y hace que hoy día no se respeten las normas sanitarias”.