Adelantó que se estudia la instalación de una barrera sanitaria con Ñuble, junto a las autoridades de Salud. “Voy a colaborar con lo que determinen”, sostuvo.
La medianoche de este jueves comenzó su tercer mandato como jefe de la Defensa Nacional en el Bío Bío, el Contraalmirante Carlos Huber Vio, quien se desempeña como jefe de la Segunda Zona Naval de Talcahuano.
Pero esta vez, lo hace bajo circunstancias distintas, como él mismo reconoce. La primera fue en febrero de 2019, cuando se decretó estado de excepción constitucional por incendios forestales. La segunda ocasión que Huber tomó las riendas de la Región fue en octubre de 2019, tras el estallido social. En la ocasión, recibió cuestionamientos por el rol que tuvieron las fuerzas armadas y de orden ante vulneraciones a los Derechos Humanos.
Ahora, sostuvo, es una situación totalmente distinta. De hecho, en su punto de prensa “de presentación” ante los medios, debutó un podio en las afueras del edificio del Gobierno Regional, donde, además, se realizaron controles de temperatura a todos quienes ingresaron a dichas dependencias.
“Aquí estamos al servicio del apoyo humanitario, en colaboración con las autoridades sanitarias que están abordando la emergencia para mantener el orden público, básicamente es de apoyo, poner todo nuestro aparato de coordinación logístico al servicio de la autoridad sanitaria para salir lo antes posible de la crisis”, manifestó Carlos Huber.
Entre las primeras coordinaciones realizadas se encuentra la distribución de mil efectivos del Ejército, Armada y Carabineros, quienes se encuentran a cargo de la custodia de centros de salud para apoyo en la distribución y vacunación que realiza la autoridad sanitaria en estos recintos, a lo que se suman patrullajes para mantener el orden público.
En relación a medidas restrictivas, el jefe de la Defensa Nacional fue enfático: “Por ahora no está contemplado decretar un toque de queda y depende de lo que digan las autoridades sanitarias”.
Una de las solicitudes realizadas por los alcaldes de la Región el miércoles pasado apuntaba a la concreción de una barrera sanitaria con la región de Ñuble. Lo anterior, debido al explosivo crecimiento de casos en esa zona (hasta ayer 28, la segunda región con más casos después de la Metropolitana).
El Contraalmirante explicó que una medida de estas características es estudiada en conjunto con la autoridad sanitaria. “Yo voy a colaborar y hacer cumplir las determinaciones que ellos tomen”, aseguró.
Durante la tarde de ayer se estableció una barrera sanitaria en el terminal de Buses de Collao, en donde personal de la seremi de Salud en compañía de efectivos del Regimiento Chacabuco realizaron mediciones de temperatura corporal a los pasajeros que llegaron a la zona.
Respecto a la Festividad de San Sebastián en Yumbel se estableció un plan candado, con efectivo militares que bloquearon los accesos a la comuna. “La idea es que los feligreses no vayan y evitar grandes manifestaciones, esto es un foco de contaminación importante”, explicó Huber.