Voces sociales analizan las características que buscan en los rostros que se abren camino para representar a la ciudadanía. Transparencia, vocación y conexión con la población son algunos de los atributos que deberán tener los futuros candidatos.
El estallido social sin duda impactará a futuro en muchos ámbitos del país, siendo uno de ellos los próximos procesos eleccionarios.
En ese sentido, la designación de autoridades y los candidatos que deseen presentarse a una elección popular deberán tener claro las nuevas condiciones que exigirá la ciudadanía.
Una población más empoderada, con un mayor análisis del contexto político y con exigencias y un rol fiscalizador de quien lo represente, produce un cambio en el perfil del político post estallido social en el país.
“El estallido social repercute en los nuevos candidatos. Lo que ha estado en el centro de la crítica principalmente es la política y el ejercicio político. Va a implicar a quienes quieran disputar cargos de representación popular nuevas formas de cercanía y representación de la ciudadanía”, explica la socióloga y académica de la Universidad de Concepción (UdeC), Violeta Montero.
La profesional de la UdeC añade que “los atributos que más se valoran para los candidatos, tomando en cuenta los resultados del Barómetro Regional, son probidad y transparencia, que sea de la Región, y que tenga propuestas programáticas pertinentes a las necesidades del territorio. El perfil que la ciudadanía espera de los candidatos no es un cambio explicable solamente por el estallido de octubre, sino que es algo que se venía dando con anterioridad. Se requieren candidatos representativos del territorio, que logren mayor cercanía y representación de las demandas de la ciudadanía, distanciándose de las estructuras tradicionales”.
Diversos representantes de organizaciones sociales también dieron su visión sobre el perfil que deben tener los nuevos candidatos en la política chilena post estallido social. “Si hay algo que demostró el estallido es una mirada más acuciosa del ciudadano respecto de las responsabilidades de los políticos en general. Se va a exigir que el candidato lleve las expectativas del ciudadano a donde sea que tenga que ser representado. Si eso no se cumple, se arriesga a recibir la reprimenda de sus electores. La ciudadanía está muy pendiente del efecto de las decisiones de los políticos, cada vez tienen que ser más cercanos, sentir el pulso de la ciudadanía con mayor frecuencia, reunirse con la población y efectivamente representar a los ciudadanos”, señaló la presidenta regional de la Anef, Lorena Lobos.
Por su parte, Francisca Rubio, vocera del movimiento 8M Concepción, se refirió a la clase política comentando que “el estallido muestra a una sociedad cansada y desconfiada de la actual clase política, los mete a todos en el mismo saco sin hacer distinciones. Hoy la ciudadanía exige personas que no trabajen por sus intereses, sino que por el interés del pueblo. Hoy, un candidato debe ser una persona sin antecedentes de corrupción, con un compromiso real”.
Para Bexsabé Vidal, vocera y coordinadora provincial de No Más AFP, el estallido social “deja en claro que la ciudadanía está cansada y está deslegitimando a los políticos que se han aprovechado del cargo. La ciudadanía necesita personas confiables, transparentes y que los representen, una persona transversal, con probidad, ética y características humanas de empatía para estar en el lugar de los ciudadanos”.
En esa misma línea, Pavel Guíñez, coordinador de la Confederación Profesional de Universitarios de los Servicios de Salud, detalló que “una característica fundamental será la capacidad de ser parte del movimiento social, ser un candidato que represente los intereses de la gente. No tenemos candidatos que vayan a debatir de política con sus votantes, tenemos candidatos que van a repartir dulces, canastas familiares, implementos deportivos, se sacan la foto y se van”.
Gustavo Sotomayor, coordinador regional de la Federación Nacional de Pobladores, analizó el perfil del próximo candidato post estallido sosteniendo que “se puede dar la tendencia donde la gente busque real participación y quiera levantar candidatos que escuchen y ejecuten políticas públicas en favor de organizaciones sociales. Se formará una diferencia entre candidatos de la antigua política y dirigentes sociales”. Finalmente, Nelly Arratia, secretaria general de la FAFEM, precisó que “transparencia debe ser la principal característica de los candidatos. Los candidatos tienen que estar y escuchar a los que los eligen”.