En un discurso desde La Moneda, el presidente Sebastián Piñera realizó un balance de las últimas semanas de crisis social y manifestaciones generalizadas en el país. Fue su primera intervención tras el acuerdo sobre una nueva Constitución que se fraguó en el Congreso.
El mandatario reconoció que el pasado martes 12, día de masivas manifestaciones y violencia callejera, pensó en decretar nuevamente Estado de Emergencia y devolver a los militares a la calle. “Esa noche, como Presidente de Chile, tuve que optar entre dos caminos muy difíciles. El camino de la fuerza, a través de decretar un nuevo Estado de Excepción Constitucional, o el camino de la paz. Nuestro Escudo Nacional dice “por la razón o la fuerza”. Optamos por el camino de la razón, para darle una oportunidad a la paz”, dijo.
Además, hizo un reconocimiento explícito de las violaciones a los derechos humanos por parte de efectivos de las fuerzas armadas y carabineros durante este períodos las cuales condenó.
“En algunos casos no se respetaron los protocolos, hubo uso excesivo de la fuerza, se cometieron abusos o delitos y no se respetaron los derechos de todos (…) Nuestro gobierno hará todos los esfuerzos para que exista justicia y no impunidad”.
“Nuestro compromiso con los derechos humanos, con la verdad y con la justicia, exige que todos estos casos que están siendo investigados por sumarios administrativos o por la Fiscalía, sigan siendo investigados para que, en función del mérito de la causa, puedan ser conocidos y juzgados por nuestros tribunales de Justicia. No habrá impunidad ni con los que hicieron actos de inusitada violencia, ni con aquellos que cometieron atropellos o abusos“, declaró Piñera.
El Mandatario –en la línea de lo anunciado por el ministro de Hacienda, Ignacio Briones– anunció su disposición para avanzar más allá del anunciado aumento del 20% en la pensión básica solidaria, pero de forma gradual.
“Nuestra intención es avanzar más allá del aumento del 20% ya propuesto, pero en forma responsable y a través de un camino con gradualidad, para poder cumplir con hechos y no sólo intenciones”, afirmó el jefe de Estado.
Este camino paulatino -sin detallarlo-, lo justificó de la siguiente manera: “Debemos evitar caer en el populismo y la demagogia, que sólo significarán dolor y frustración para todos los chilenos”.
También tuvo palabras para el acuerdo que los parlamentarios lograron para una nueva constitución.“Quiero valorar y agradecer desde el fondo del alma a ese amplio grupo de parlamentarios que, después de muchas horas de difíciles y legítimas discusiones, lograron superar muchas de sus históricas diferencias y alcanzar un acuerdo que pone los intereses de Chile y los chilenos por delante. De eso se trata la buena política”.
Dentro de lo mismo, señaló que este acuerdo “significa un compromiso amplio y sólido, que estoy seguro tiene el respaldo mayoritario de la ciudadanía”.