Siguen las reacciones por la votación del Consejo Regional que no alcanzó el quórum para aprobar el proyecto del Ejecutivo para incentivar el turismo local.
El intendente Sergio Giacaman pidió a los consejeros que estén a la altura del debate. “La gente está aburrida de la polémica y debemos colocar a la Región en el centro. Vamos a reingresar el proyecto y esperamos que el Core lo apruebe; yo estoy dispuesto a que pongamos a la Región en el centro y hay que terminar con la pequeñez y las peleas políticas”, opinó.
Más radical en sus declaraciones fue la senadora y presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, quien aseguró que quienes votaron en contra de este proyecto no merecen ser consejeros regionales. “Me parece impresentable e incomprensible que se vote de esta manera un proyecto tan importante para la Región. Yo espero que los consejeros que votaron en contra tengan una buena explicación, espero que no sea por intereses personales o intereses políticos pequeños, sino ninguno de ellos merece ser consejero regional. Si lo hicieron por algún interés pequeño no merecen ser cores ni nada. Espero, sinceramente, que no sea una maniobra en contra del intendente, ya que el daño que están dispuestos a hacerle a la Región es gigante”, respondió.
Al interior del Consejo Regional, en tanto, también existen visiones por lo ocurrido la tarde del miércoles. La consejera gremialista Marlene Pérez pidió dejar de la los bandos políticos y trabajar por la gente. “Yo no estoy con ningún bando y quiero trabajar por el desarrollo de la Región y trabajar por lo que la gente espera. Yo prefiero pensar que hubo informes que no se presentaron, ya que sería lamentable y decepcionante pensar un manejo político de la votación”, comentó.
En tanto, el consejero de Renovación Nacional, Patricio Lara, estimó que no existe quiebre al interior del oficialismo. “Esto fue algo transversal en todas las bancadas y nos llama la atención que no exista una mirada de región en este tipo de proyectos. Creo que pudo haber un uso político y eso es bastante feo, pero nosotros estamos para trabajar por la Región”.
Uno de los afectados por este rechazo fue el alcalde de Tomé, Eduardo Aguilera, a raíz de la negativa al festival Viva Dichato. El jefe comunal no quiso ahondar en el debate político. “Yo no me atrevería a hablar de una maniobra política, pero nos sentimos afectados al no haberse aprobado”, aseguró.