Pocos minutos antes de ingresar al Comité Político del jueves, el diputado del Distrito 21, Iván Norambuena (UDI), al ser consultado por la inminente salida de Jorge Ulloa de la Intendencia del Bío Bío, comentó: “Veo una maniobra que es propia de ciertos estilos, de crear ciertos montajes, también, que están al filo de la mafia política en nuestra región y que se da en todos los lugares. Yo lamento que se hayan copiado estilos que estábamos acostumbrados a ver en sectores de izquierda y que hoy lo tengamos en gente de nuestro gobierno”.

Minutos antes, en horas de la mañana, Norambuena había manifestado que la salida del intendente “era el rumor de la semana”, desestimando la veracidad de los trascendidos que ese día se acentuaron con fuerza. Los dichos del parlamentario de las provincias de Arauco y Bío Bío, no solo reflejan algo que es evidente desde hace años en la Región, las malas relaciones entre la UDI y RN (por lo menos, desde fines de los ’90, y la marcada rivalidad entre Jacqueline van Rysselberghe y Claudio Eguiluz), sino también es la primera pista de quienes finalmente perdieron con “la renuncia” de Ulloa de la administración regional.

Sí, porque en esta pasada también hubo ganadores y perdedores en el oficialismo. Y, entre los últimos, probablemente, estén los parlamentarios contrarios a la gestión de Van Rysselberghe en la UDI, el mencionado Norambuena y Sergio Bobadilla (como se recordará, los dos apoyaron un proyecto distinto al de la senadora en la interna del partido). El último de los mencionados, de hecho, comunicó la salida de Ulloa a su equipo, recién la mañana del viernes, poco antes que se oficializara. Ambos parlamentarios fueron sorprendidos con la decisión de dejar fuera a un ex colega con el cual existe gran afinidad.

Afinidad que Ulloa también tenía con el ex timonel de RN, Claudio Eguiluz. Según fuentes del Gobierno Regional (Gore), el gremialista siempre ha respetado la trayectoria política del excore y, por ello, por ejemplo, pudo llevar a cabo reuniones en el edificio de Avenida Prat. Esto podría cambiar con el arribo de Sergio Giacaman a la Intendencia, pues como se sabe es muy cercano a la senadora Van Rysselberghe, quien, a su vez, ya está dicho, mantiene marcadas diferencias con Eguiluz. La timonel gremialista, por cierto, es una de las grandes ganadoras con este cambio, dijeron fuentes ligadas al partido.

Con la instalación del ingeniero comercial en la Intendencia, otra persona que pudiera verse favorecida es la actual presidenta del Consejo Regional (Core), Flor Weisse, quien suena como la más probable candidata a gobernadora, cuya primera elección se llevará a cabo el próximo año. La fecha es importante, pues si Giacaman fuera carta tendría que renunciar en los próximos meses, comentaron en el oficialismo. “Lo de Flor Weisse está definido”, dijo otro informante cercano a RN.

Desde el punto vista electoral, reconocieron fuentes ligadas a partidos de la ex Nueva Mayoría, la figura de Sergio Giacaman “no nos conviene”. Según comentaron, Ulloa siempre fue percibido como una ventaja, en ese sentido, considerando su perfil y el rechazo que despertaba en ciertos sectores de la ciudadanía por su afinidad con la dictadura militar. Pero, claro, Giacaman tiene otro perfil donde, entre otras cosas, destaca por su trabajo enfocado a lo social, desde los tiempos en que ofició como director ejecutivo del Hogar de Cristo.