“Ciertamente mi contratación tiene que ver con la posibilidad de agilizar los procesos, abocarse a eso en el marco de la normativa universitaria vigente, la legalidad que nos rige y el Derecho Internacional”, destaca Patricia Parra, fiscal de la Dirección de Equidad de Género y Diversidad de la Universidad de Concepción.
De vasta experiencia en materias de Derechos Humanos -con diez años en la unidad respectiva del Ministerio del Interior-, la abogada tendrá la tarea de encabezar las investigaciones por eventuales situaciones de abuso, acoso y otras al interior de la casa de estudios.
Así lo entiende y busca dejar en claro. “Una sola denuncia puede ser la punta del iceberg de un problema mayor”, asegura en esta entrevista, la primera concedida tras su instalación el martes pasado.
– ¿Cuál es el estado de acusaciones con que se encuentra?
– Lo que pasa es que a esta dirección, el hecho de que le lleguen denuncias, lejos de ser una complicación, es la manifestación de que muchas mujeres hoy están dando cuenta de una problemática que hasta hace meses estaba oculta. Y eso se está tratando de analizar de la forma más seria posible. Esto guarda relación con sostener las garantías del debido proceso. Entendemos que toda persona denunciante esperaría que esto se resuelva lo más rápido posible, pero una de las cosas que tenemos que garantizar, y esa es una de las luchas por las que volvimos a la democracia, es que como las personas tienen el derecho a la verdad, existe lo que se denomina la presunción de inocencia. Por tanto, aquí hay un correlato en el principio de igualdad.
– ¿La normativa garantiza igualdad?
– Igualdad es que se garantice que los derechos pueden ser hechos valer de acuerdo a la normativa. Si hay una denuncia, lo que hay que hacer es investigarla y darle el derecho a la persona que aparece como supuesto hechor a que haga sus descargos. Así, a partir de una investigación seria e imparcial, lograr establecer la verdad de los hechos. Ciertamente, hay hechos que pueden configurar el carácter de delito y hay otros que pueden ser infracciones administrativas. Los que constituyen delito tienen una normativa que obliga a la universidad a respetarla. Es decir, Ministerio Público.
– ¿Con cuántos casos trabaja la dirección hoy?
– Los que ayer señaló el rector. (Alrededor de cinco).
– ¿Se trata de casos de abuso, acoso u otros?
– Son temas de connotación sexual. No corresponde que le diga si es abuso, acoso u otro.
– La denuncia es un relato que posteriormente se tipifica.
– Exacto. Hay una denuncia y efectivamente el análisis de la denuncia pasa por una tipificación. Desde ese punto de vista se orienta a la o las denunciantes.
– Se ha hecho hincapié en garantizar el debido proceso. ¿Solicitudes como apartar de funciones a denunciados lo trastocarían?
– Lo que pasa es que, como explicaba el fiscal de la universidad, si nosotros aplicamos medidas cautelares tienen que ser en el marco de la proporcionalidad, porque sino inmediatamente tienes un recurso de protección de vuelta. El señor fiscal le ha explicado a las alumnas movilizadas que se están implementando algunas medidas paliativas que pueden, en el mediano plazo, mientras se está desarrollando una investigación, hacer frente a esta situación. Pero ciertamente lo determinante aquí es la investigación.
– ¿Cómo garantía del debido proceso?
– Creo que a veces una sola denuncia puede ser la punta del iceberg de un problema mayor. La denuncia de una alumna, el atreverse, y que se lleve a cabo una investigación citando a otras personas, permite establecer un contexto de regularidad frente a un hecho, eventualmente, señalado como puntual.
– ¿Las denuncias anónimas problematizan la investigación?
– Las denuncias anónimas no es que no sirvan, no es que no le sirvan a esta dirección. No le sirven a la misma persona que denuncia, porque puede solicitar reserva de su nombre mientras dure la investigación, con la consiguiente activación de los protocolos de acompañamiento. No hay nada mejor que una denuncia presencial ante esta dirección donde se va a resguardar la identidad si así se solicita.