“Quizás el error fue no haber dado mi opinión en forma clara”. Con esas palabras el seremi de Educación del Bío Bío, Fernando Peña, englobó su autocrítica tras los cuestionamientos recibidos por su apreciación respecto a la pertinencia de la educación monogenérica (segregada entre hombres y mujeres).

En el marco de una entrega de computadores en Talcahuano, Peña intentó repeler los últimos dardos dirigidos a su persona, reiterando que fue malinterpretado en sus expresiones y que nunca quiso señalar que existieran diferencias cognitivas por sexo.

Para los estudiantes, sin embargo, las explicaciones llegaron tarde. A la petición de renuncia realizada el miércoles por secundarias tras la marcha, se sumó el llamado a dimisión emitido por la Confech. Ayer ambos estamentos, con sus respectivos voceros locales, aguardaron por la salida de Peña del establecimiento porteño Almirante Pedro Espina Ritchie con la finalidad de increparlo.

El seremi accedió a improvisar un tenso diálogo, que no obstante poco logró aclarar entre las partes.

“La semana pasada hice unas declaraciones en un medio, donde se me consultaba mi opinión respecto de la educación monogenérica, yo dije que no tenía una opinión formada (…). No tuve oportunidad de aclararlo, sí lo hago ahora, frente a ustedes. Esa no es mi opinión. Hasta ahora he recibido insultos de todo tipo y lo que quiero es que la polémica se detenga”, indicó Peña.

Mario Tapia, presidente de la Feutfsm y vocero Confech, le replicó enjuiciando su permanencia en la cartera. “Frente a tamaña tontera, que es la que se expresa a través de los medios de comunicación, nosotros como Confech tomamos la resolución de exigirle la renuncia inmediata. Mientras no se dé su renuncia, vamos a declarar como interlocutor no válido a cualquier autoridad del Gobierno Regional y no vamos a seguir dialogando. No podemos dialogar con una autoridad y con un liderazgo en el área técnica de educación que trabaje bajo la premisa de que las mujeres aprenden mucho más lento que los hombres”, sentenció el representante.

A esa visión se adhirió Alén Arancibia, vocera de la Cones y la Fesec, afirmando que “a nivel de Cones manifestamos lo mismo, exigimos la renuncia inmediata. Usted dice que está a favor del diálogo, pero ayer (miércoles), mientras nosotras nos manifestábamos pacíficamente afuera de la Seremi, fuimos golpeadas, abusadas y completamente violentadas. Es una inconsecuencia tremenda lo que usted está planteando”.

Ante los emplazamientos, Peña -quien aseguró que el subsecretario de Educación, Raúl Figueroa, se comunicó con él para entregarle su apoyo- sostuvo que ya había aclarado su posición, y que en caso de seguir ésta generando dudas, queda a los estudiantes evaluar. “Mantengo mi invitación al diálogo”, apuntó, respecto a una cita agendada para el viernes con los secundarios y a la que los liceanos rehusaron de participar. “Si esa reunión no se da, yo veo difícil dar respuesta a su petitorio”, agregó.

Los estudiantes recalcaron que en la medida de que no se concrete la salida del seremi de Educación, evitarán todo acercamiento con las autoridades del gobierno en el Bío Bío, ya sea intendente o gobernador. En cuanto a las solicitudes formales, informaron que serán remitidas vía carta y ya no más junto a rondas de diálogo.

Consultada en este sentido, la Intendencia Regional resignó entregar declaraciones, sentenciando que por ahora no se referirá al tema.

Acciones legales por marcha

La marcha del miércoles cerró con 42 detenidos, 15 menores y 27 adultos. Secundarias que fueron aprehendidas por Fuerzas Especiales narran haber sido víctimas de diversos hechos de violencia, entre ellos golpes y tocaciones de parte de efectivos.

Por ello, determinaron presentar acciones legales. La abogada Victoria Fariña estará a cargo de la representación. “Fueron agredidas, vulneradas, arrastradas. Vamos a ver quiénes son los funcionarios que participaron en esto, recién hoy (ayer) nos estamos reuniendo para pedir las acciones al interior de la institución”, comentó la profesional.