Convergencia y directivas: el nuevo mapa del Frente Amplio en la Región del Bío Bío

En un proceso fundacional y de reordenamiento político se encuentran las fuerzas que componen el Frente Amplio en el Bío Bío.

Superada la reflexión post esfuerzo electoral, el cual les otorgó presencia en ambas cámaras con 20 diputados y un senador, se acerca el momento de las definiciones orgánicas.

Lo anterior, de cara al congreso del conglomerado fijado en un principio para septiembre; hito mayor que se espera zanje las diferencias que despuntan entre los distintos movimientos que integran el frente y que les han valido tanto críticas del exterior como también el nunca deseado “fuego amigo”.

En la Región la situación no es del todo distinta de la escena nacional. Félix González, diputado ecologista, y Javier Sandoval, core por Igualdad, se consolidan como voceros naturales del sector. Por su parte, el Partido Humanista opera como una tienda legalizada, mientras tanto otras colectividades escogen sus directivas.

Revolución Democrática (RD) generó su primera mesa como partido en el Bío Bío el mes pasado, resultando electo presidente Eric Riquelme, quien si bien recalca que no se adscribe a ningún “lote”, reconoce que en su vereda conviven sensibilidades del tercerismo, territorialismo y los comunes.

En el Movimiento Autonomista (MA), Karen Segura se alzó como nueva encargada política en la zona, tras imponerse en las elecciones de fines de marzo. En su directiva la acompaña Camilo Riffo, ex candidato a diputado y una de las principales figuras del autonomismo en Concepción. Su presencia para algunos militantes es una oportunidad de levantarlo como futura opción a la alcaldía penquista, aunque, comentan, el debate aún no se ha dado.

En el foro por converger se encuentran Nueva Democracia (ND), afectada hace algunos meses por una polémica salida de adeptos de la Unión Nacional Estudiantil, Izquierda Libertaria (IL) y Socialismo y Libertad (SOL), grupos que se han acercado al autonomismo para ver la posibilidad de consolidar un nuevo referente que los reúna.

No obstante las demostraciones de voluntad, dicha circunstancia se encuentra, en la actualidad, lejos. “Lo que nosotros estamos pensando es la configuración de un nuevo espacio que sea unitario, pero hay que deliberar sus características”, sostiene Javier Miranda, encargado político del comunal Concepción de ND. Lautaro Llanos en tanto, de Sol en el Bío Bío, afirma que existen dos posibilidades de convergencia. Una es la política, que se orienta a encontrar postulados conjuntos, y otra es la orgánica, más compleja, que implica fusión de organizaciones. Para esta última, apunta, “nosotros creemos que no están las condiciones, porque para nosotros ese tipo de organización debe tener unidad estratégica”.

Camila Ortiz, encargada política de IL en la Región, también pone paños fríos, puesto que, dice, hay temas internos que resolver. “Nosotros miramos el proceso de nuestra legalización como partido. Lo estamos estudiando”, aclara. El autonomismo igualmente prefiere la cautela. Karen Segura señala que “se han hecho diálogos, pero eso no define que estemos en un proceso abierto de convergencia, sino más bien que nos hemos sentado a conversar”.

¿Es la convergencia una apuesta para equiparar influencia con RD dentro del Frente Amplio? Eric Riquelme indica que la realidad no está tan lejos de esa presunción. “Creemos que si se está dando esta convergencia es porque RD es el partido más grande. Creo que efectivamente las demás orgánicas quieren hacer un contrapeso”, expresa.

El futuro próximo

El Frente Amplio llevará a cabo su congreso orgánico a nivel de coalición el segundo semestre. La instancia para muchos dentro del conglomerado es la gran oportunidad que se necesita para subsanar diferencias de fondo. Esa tarea también está pendiente en la zona.

“Estamos al debe en generar las confianzas entre las mismas orgánicas políticas del frente y que todos salgamos diciendo lo mismo, que no nos veamos fraccionados. Todo se resuelve en el congreso orgánico. Pasaremos de ser, como nos han dicho, una plataforma electoral y generaremos unidad”, lanza Eric Riquelme de RD.

Las otras fuerzas coinciden en dicha necesidad, pero sitúan en primer orden los diálogos internos para ofrecer respuestas. Es por ello que en mayo SOL, libertarios y autonomistas tendrán encuentros políticos decisivos. En el caso de este último colectivo, la discusión por transformarse en partido político estará presente con toda seguridad, aunque su encargada política en el Bío Bío enfatiza que aún se encuentran “en la fase previa de ese debate”.

Las coincidencias del frenteamplismo pasan hoy por robustecer el trabajo territorial más allá de Concepción, afianzando una presencia en lo local que a su vez permita proyectar el escenario alcaldicio de 2020. En ese sentido, por ejemplo, RD ve hoy con buenos ojos su despliegue en San Pedro de la Paz y Coronel, mientras que MA pretende profundizar el trabajo en Talcahuano.

En lo macro igualmente se aprecia unidad, ya que ningún colectivo rehúye del objetivo mayor que los convoca a estar reunidos: competir nuevamente por La Moneda en tres años más y encaminarse, esta vez, a segunda vuelta.